Claves para convertirse en un Youtuber de cocina de éxito
Ha conseguido que a su marido le guste el aguacate y que su hijo de 10 años se coma la yema del huevo después de nueve años y medio negándose a probarla. No hay reto que se le atragante a María José, creadora del blog y del canal de YouTube Las recetas de MJ.
Pese a haber logrado casi dos millones y medio de reproducciones en YouTube con su Cheesecake de OREO y tener más de 100.000 suscriptores en su canal, María José dice no conocer la receta del éxito: "Nunca se sabe muy bien qué va a funcionar mejor; a mí me puede gustar mucho un plato y luego a la gente no, o al revés".
Sin embargo, tras asistir a una de sus master class y verla manos a la obra, no cuesta imaginarse por qué les ha ido tan bien a esta barcelonesa y a su marido Víctor, cámara, encargado del montaje y la edición de sus vídeos, y catador profesional de las recetas de su esposa.
1. NATURALIDAD
Para empezar, destaca la naturalidad y la cercanía con la que habla la pareja. "Vamos a cocinar como si estuviéramos en mi cocina; esto no es una master class como las de la tele", advierte desde el principio María José.
2. PACIENCIA
Efectivamente, no es como en la tele; la mayoría somos principiantes y prueba de ello son las preguntas que se escuchan, del tipo "¿qué es lo del AOVE [aceite de oliva virgen extra]?" o "¿cómo se hace un movimiento envolvente?". Pero la bloguera tiene mucha paciencia —otra de las cualidades necesarias tanto para montar un tutorial como para esperar la llegada de suscriptores— y no deja de dar ánimos: "La comida primero entra por los ojos, pero lo más importante es el sabor. Además, seguro que la próxima vez sale perfecto", consuela a un aprendiz insatisfecho con la presentación de su canelón de aguacate con tartar de atún rojo.
3. IMAGINACIÓN
"A mí las mejores recetas me han salido de grandes estropicios", añade. Parece, pues, que una pizca de imaginación y recursos para idear un plan B también son imprescindibles en el mundo de la cocina en YouTube. “Si ves que el aguacate está muy maduro y no se pueden hacer láminas finas, se puede picar en dados y servir directamente como tartar”, sugiere.
4. SER DIFERENTE
Esto nos lleva al siguiente ingrediente: la originalidad. María José reconoce que prepara recetas de otros blogs e incluso de sus chefs favoritos, como David Muñoz y Albert Adrià (con quien llegó a grabar una receta), pero que suele darles un toque distinto. "Una receta, si es salada, da mucha libertad: se pueden poner, quitar o cambiar ingredientes al gusto y normalmente queda bien", asegura.
No ocurre lo mismo con la repostería, donde, si no eres un experto y quieres que el pastel se pueda comer, "hay que seguir los pasos y medidas a rajatabla". Quizá por eso María José se inclina más por lo salado, a pesar de que sus vídeos más populares son de cheesecakes, cupcakes, donuts y popcakes. "Los dulces casi siempre son un éxito", explica, a lo que habría que añadir, a juzgar por estos postres, que llevan ventaja si su nombre es en inglés.
5. CLARIDAD
La claridad y concisión de las recetas son otros de los rasgos que definen su blog. El formato de vídeo es muy sencillo y no cuesta seguir los pasos de cada plato: "La gente me dice que hago que lo difícil parezca fácil", cuenta la cocinera, "pero es que hay personas que piensan que hacer mayonesa o mermelada casera o montar la nata es muy complicado, y en realidad no se tarda nada". Además, asegura que "una vez que lo pruebas, no vuelves a comprar comida de plástico", como llama María José a la comida envasada. La calidad y autenticidad de los productos son también sus señas de identidad.
6. PASIÓN
Pero si esta pareja tiene que elegir el requisito más importante para convertirse en un Youtuber de éxito, ambos lo tienen claro: la pasión. Porque si hay pasión, hay ganas, y "cuando hay ganas, hay constancia". La falta de tiempo no es un pretexto "si esto te gusta de verdad", y lo demuestran ellos mismos, que trabajan y tienen dos hijos —el chico ya apunta maneras, "dice que quiere ser Youtuber"—, por lo que graban "o los sábados a las siete de la mañana o entre semana después de acostar a los niños". Parece una carga innecesaria y, sin embargo, María José está convencida de que "no hay trabajo más agradecido que dar de comer a tus invitados y que les guste".