Los temas de los que hablarán Rajoy y Merkel en su encuentro en Galicia
La cumbre europea del 30 de agosto estará en el centro de la reunión que mantendrán este domingo y el lunes la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, en Santiago de Compostela.
Aunque el Gobierno alemán calificó la visita de Merkel como "un encuentro informal", señaló que los dos políticos hablarán de la situación internacional y de los asuntos por resolver en la cumbre europea.
Entre los temas de la cumbre europea está el reparto de puestos y la posibilidad de que el ministro español de Economía, Luis de Guindos, se convierta en presidente del Eurogrupo. Además, probablemente Rajoy buscará el apoyo de Merkel para que Miguel Arias Cañete sea comisario.
La preparación de la cumbre europea fue mencionada expresamente por el departamento de prensa como uno de los puntos de la agenda y, en este sentido, no quiso descartar pero tampoco confirmar que se vaya a hablar del reparto de cargos.
DE PASEO JUNTOS
Merkel llegará el domingo por la tarde a Santiago de Compostela, donde será recibida por Rajoy, con quien a continuación recorrerá un trecho del Camino de Santiago.
El lunes está previsto que mantengan una reunión de trabajo, tras la cual ofrecerán una conferencia de prensa conjunta, y después visitarán la Catedral de Santiago de Compostela.
En la reunión abordarán temas bilaterales, europeos -entre ellos la conformación de la nueva CE- y la situación internacional. El Gobierno español mantiene su apuesta por Miguel Arias Cañete, exministro de Agricultura, y confía en que su nombramiento salga adelante y asuma una Comisaría de peso en el área económica.
Además, las negociaciones del Consejo Europeo podrían despejar el camino del ministro español de Economía, Luis de Guindos, para presidir el Eurogrupo, la otra gran apuesta de Rajoy para Europa.
Aunque el Gobierno español no planteó formalmente su candidatura, Rajoy espera que De Guindos pueda asumir la presidencia del Eurogrupo, y para ello cuenta con el respaldo de Alemania, tanto de su canciller como de su ministro de Finanzas, Wolfgang Schauble.