Flipa con la polémica de la estampita del Grand Prix de Lalachus y enseña algo de su salón que le da mil vueltas: "Os va a dar un derrame con esto"
Un archivo kitsch guardado en Asturias.
Si por casualidad han tenido que pasar fuera de España las últimas (y primeras) 48 horas del año 2025, sepan que uno de los temas de los que más se habla en el país (más bien en las redes sociales) es el de la denuncia por un supuesto delito contra los sentimientos religiosos que ha puesto la asociación ultraderechista Hazte Oír contra los presentadores de las campanadas de Fin de Año en Televisión Española, Lalachus y David Broncano, por enseñar durante la retransmisión una estampita del Sagrado Corazón que, en vez de una imagen religiosa, estaba protagonizada por una vaquilla del programa Grand Prix.
Antes de comerse las doce uvas y recibir el 2025, Lalachus y David Broncano quisieron compartir con la audiencia los amuletos que se habían llevado a la Puerta del Sol de Madrid para recibir el año nuevo. En el caso de Lalachus, mostró una estampita de la mascota del programa de Ramón García convertida en personaje de culto, de la misma forma que se ha hecho en otras ocasiones para 'divinizar' figuras del deporte o la política.
Desde ese momento, especialmente en las redes sociales, casi todo el mundo ha querido dejar clara su posición sobre un asunto que se ha convertido en cuestión de Estado y que ha derivado en la promesa del Gobierno de modificar el delito en cuestión este 2025 para "garantizar la libertad de expresión y la libertad de culto". Sin embargo, en solo dos días ya han sido miles los comentarios que se han publicado en plataformas como 'X', en la que personajes como Arturo Pérez-Reverte, Bob Pop, Jordi Cruz o Valeria Ros, compañera de Lalachus en La Revuelta, han emitido una opinión sobre lo que le ha ocurrido a la cómica.
La polémica de la estampita de Lalachus, cuyo recorrido legal parece estar abocado hacia el archivo de las denuncias, ha dado el salto a otras redes sociales que no pertenecen al multimillonario Elon Musk. Así, se pueden encontrar contenidos sobre el asunto hasta en plataformas como TikTok, donde la influencer asturiana Chicle de Fresa, conocida en la red social china por su colección de Barbie, ha compartido un vídeo en el que enseña algunos cuadros de los que tiene en el salón de su casa y en el que se pregunta: "¿Tenemos la piel así de fina o solo buscamos polemizar por todo?".
"Estoy flipando un poco con todo esto", dice la asturiana nada más empezar su vídeo. "La gente que está poniendo de vuelta y media a Lalachus por lo de enseñar la estampita de la vaca del Grand Prix, si entran en el salón de mi casa les da un derrame directamente", dice antes de enseñar todas las reproducciones del Sagrado Corazón, alteradas con las caras de varios famosos que tiene en las estanterías de su casa.
"A ver..., por aquí tengo a mi querido Santo Brad en El Club de la Lucha, por el actor Brad Pitt; tengo a San Peaky Blinder con Tommy Shelby... tengo a San Jules de Pulp Fiction con corazón de hamburguesa cajuna y, por supuesto, a San Marlon Brando en El Padrino con gatete incluido", explica Chicle de Fresa, que aún guarda otras reproducciones en su archivo personal, pero que todavía no ha llegado a enmarcar. Un archivo kitsch que, según confiesa, no ha ofendido a las personas de diferentes confesiones religiosas que han pasado por su casa y han visto sus fotos.