Un piloto despistado decide dar media vuelta en mitad del vuelo al ser informado de que puede ser deportado en el país de destino
El vuelo fue retrasado más de siete horas.
El Boeing 787 Dreamliner despegó de Los Ángeles el pasado 22 de marzo, según lo programado a las 14.00 hora local. Sin embargo, cuando alcanzó la altitud de crucero, los pilotos dejaron de ascender al descubrir que uno de los miembros de la tripulación no tenía pasaporte.
Según publica el medio polaco Onet Podróze, dos horas después del despegue, la aeronave volvió a aterrizar en el aeropuerto de San Francisco. Después de tocar tierra, resultó que la tripulación no tendría suficientes horas de trabajo para realizar legalmente un vuelo tan largo. Finalmente, "United Airlines comenzó a buscar una nueva tripulación de pilotos y tripulantes de cabinas".
El vuelo retrasado despegó en San Francisco finalmente a las 21.00 horas y la compañía "informó a los pasajeros que su vuelo fue desviado debido a un problema inesperado de la tripulación, lo que requirió un reemplazo por otro equipo". "La aerolínea aseguró que tan pronto como llegara la nueva tripulación, el viaje se reanudaría lo antes posible, disculpándose por la interrupción y agradeciendo su paciencia".
De acuerdo a la información difundida por el medio, los pilotos y auxiliares de vuelo no están obligados a presentar sus pasaportes antes de la salida en las rutas internacionales, aunque sí confirman los documentos requeridos, como pasaportes, visados o certificados de vacunación.
"El problema surge cuando llegas a un destino donde sí revisan minuciosamente el pasaporte. Especialmente en países como China", dice el medio. "En el caso de que el piloto hubiese aterrizado en Shanghái sin pasaporte, podría haber sido detenido y deportado, y United Airlines se hubiese enfrentado a una fuerte multa". Aunque también sucede que un miembro de la tripulación es deportado en el siguiente vuelo disponible, a menudo en el mismo avión en el que voló.
