Un perro policía retirado realiza un heroico rescate durante su primer paseo después de una operación
Algunos no están hechos para la jubilación.
Una bella historia, con final feliz, llegada desde Reino Unido. Un perro policía retirado protagonizó un importante rastreo y rescate de una persona que se encontraba desaparecida en la zona de Eastbourne, en el condado de East Sussex. Sin embargo, lo más llamativo de la historia no es que el animal pasase de su jubilación para resolver un último caso. Es en qué condiciones lo hizo.
Bear, un pastor alemán policía -como Rex, pero en la realidad y con ladrido británico-, cumplía 12 años el día en que salvó esta vida. Tampoco eso es lo más impresionante, sino una coincidencia más en esta historia que recoge la cadena de televisión Sky News. En esa jornada, el can acababa de salir a la calle por primera vez en dos semanas.
El motivo es que Bear se había estado recuperando de una intervención en la que le habían extirpado dos tumores benignos. Mientras disfrutaba de su primer paseo después de tanto tiempo, de repente, "entró en modo trabajo". En palabras de su dueña y compañera, la exagente de policía Julia Pope, quien adoptó en 2020 al pastor alemán que acababa de jubilarse.
"No estoy seguro de que hubiera sobrevivido a la noche"
"Comenzó a indicar hacia un área de maleza densa", explicó la agente jubilada de lo que comenzó con una interrupción del paseo. "Luego nos arrastró hasta allí, donde localizó a un hombre vulnerable y nos alertó sobre él", explica Pope, recordando que "el hombre estaba confundido, mojado, tenía frío y se había caído, y no podía levantarse sin ayuda. No estoy segura de que hubiera sobrevivido a la noche, ya que hacía muchísimo frío y estaba casi oscuro en ese momento y no había nadie más en los alrededores".
Julia Pope reconoce que fue un "increíble golpe de suerte" la conjunción de factores que permitió que acabaran salvando la vida a ese hombre desaparecido. Cabe destacar que tanto ella como Bear se ayudan mutuamente, el animal es un perro de apoyo para el bienestar y los traumas del personal policial bajo el paraguas de la organización benéfica Thin Blue Paw Foundation.
Ese colectivo es una de las razones por las que Bear, a pesar de estar jubilado, estaba en condiciones de realizar ese rescate. Su historia es dura, pues a través de esa organización lograron salvarle la vida. El pastor alemán había perdido el uso de sus patas traseras y necesitó una resonancia magnética de emergencia y una cirugía para tratar cuatro hernias discales en su columna vertebral y poder volver a caminar.
Podría decirse que cada uno de sus pasos no solo mereció la pena sino que sirvió para que volvieron a salvar vidas una última vez. O quizás no y Bear tenga reservada una última historia de quienes no están hechos para jubilarse del todo.