La localidad andaluza que anuncia medidas drásticas contra la guerra de las sombrillas
La cosa se pone seria.
No es algo nuevo, pero sí que cada vez es más habitual en las costas españolas. Hablamos de la guerra de las sombrillas, la lucha de múltiples veraneantes por plantar sus sombrillas y sus enseres en primera línea de playa.
Para ello, una técnica que se está expandiendo es la de levantarse temprano, colocar la sombrilla junto a la orilla y marcharse para más tarde ocupar ese lugar en la playa (algo así como reservar el sitio).
Sin embargo, hay ayuntamientos que están comenzando a poner límites esas prácticas. Uno de ellos es el de la localidad granadina de Almuñécar, que desde este pasado fin de semana ha puesto en marcha una campaña informativa en la que inspecciona las sombrillas y enseres que se encuentran sin ocupación o abandonados, sobre todo en primera línea de playa de los arenales más concurridos.
Por el momento, les recuerdan con un adhesivo que no se puede guardar sitio, aunque pronto estas estas inspecciones podrían derivar en la retirada de sombrillas y enseres, según han informado fuentes municipales a Europa Press.
La edil de Playas de Almuñécar, Lucía González, ha detallado que la iniciativa se acordó días atrás. “Encargamos la preparación y edición de una pegatinas de aviso que recuerda el bando municipal” emitido sobre esta materia por el consistorio.
“Hemos decidido aplicar medidas drásticas”
“Ahora hemos decidido aplicar medidas drásticas para acabar con la habitual práctica de los veraneantes de poner la sombrilla a primera hora y dejarla sola toda la mañana, o abandonarla a mediodía para ir a comer y aparecer a las 18:00 horas”, ha anunciado la edil de Playas.
Desde hace dos días, “en principio estamos procediendo a informar y señalar con una pegatina que recuerda el bando” sobre “las sombrillas y enseres abandonados en las playas o sin propietarios que lo estén ocupando o usando”, advirtiendo de que "serán retirados por los empleados”.
Estas actitudes dan “una imagen que no es normal” de las playas en una situación que “no es nueva”, ha resaltado Lucía González, para quien “los abusos no se pueden ni deben consentir porque hay playa para acoger a todos”.
