El globo inflable se aleja volando y dentro hay un niño de 8 años: la intervención de un marinero desencadena el milagro
Por suerte todo acabó bien.
Una pesadilla. Es lo que vivió un niño frente a la costa norte de Sao Paulo, en Brasil. El pequeño se encontraba, según cuentan en Il Fatto Quotidiano, jugando en la playa con una pelota infable, de esas en las que te puedes meter dentro, cuando de repente se levantó un fuerte vienvo y se lo llevó mar adentro. Estuvo horas y horas a la deriva, gritando sin que nadie pudiera oírle.
Por suerte, un marinero que estaba por la zona en su barco con sus hijos, vio el globo y no dudó en aproximarse para poder salvarlo. "Primero hablamos con el niño, no tenía claro si podía respirar o no", recuerda.
En cuanto vio que estaba bien, ató el globo a su barco y lo llevó de nuevo a la orilla, donde esperaban sus familiares "desolados".
Normalmente estos globos permanecen amarrados para evitar que se escapen, pero en este caso la mala suerte, o la mala calidad, quiso que el cable se soltara. Afortunadamente, el niño se encuentra bien.