Un obrero muerto y dos heridos por el derrumbe de una obra en un colegio de Logroño
Los perros de la patrulla canina de la Policía Nacional de La Rioja han estado buscando a uno de los trabajadores, que había quedado sepultado. Al final, no han podido rescatarlo con vida. Sus compañeros están hospitalizados.
Uno de los tres heridos que ha provocado este martes el derrumbe de una de las fachadas interiores del patio del céntrico colegio de Adoratrices de Logroño ha fallecido tras estar horas bajo los escombros. Dos compañeros suyos lograron ser rescatados con vida y están hospitalizados, pero este tercero no ha podido correr la misma suerte, pese a la búsqueda intensa de los servicios de emergencia y los perros especializados de la Policía Nacional.
Todos los afectados son trabajadores de la obra que se realiza en este colegio, sin que aún se conozcan las causas que ha provocado el derrumbe. Los dos trabajadores supervivientes están en el Hospital San Pedro de la capital riojana, uno leve y el otro, con pronóstico reservado, pero consciente en el momento de su evacuación por los servicios de emergencia.
El concejal de Interior de Logroño, Francisco Iglesias, ha explicado a los periodistas que la persona que quedó atrapada estaba en una zona de difícil acceso, porque los escombros habían caído "de manera muy vertical", y se estaban realizando todos los esfuerzos para rescatarla, para lo que se trabajaba en el desescombro y se utilizaban perros expertos en la localización de personas. Las perspectivas eran malas, porque no había signos de vida, hasta que se ha localizado el cuerpo si vida.
Este suceso, que también ha ocasionado un escapes de gas, que ya ha sido solucionado, ha ocurrido hacia las 9:45 horas, cuando se ha producido un derrumbamiento en el interior del edificio que estaba en obras, en un ala lateral de tres plantas más bajo.
El concejal ha señalado que se ha registrado un derrumbamiento de la última planta en cascada hacia abajo, lo que ha afectado a las tres personas que trabajan en ese momento en el edificio.
Ha añadido que se desconocen las causas del suceso, lo que ya investiga la Policía Nacional; mientras que el Ayuntamiento de Logroño ha iniciado un expediente para comprobar lo relacionado con las licencias de esta obra.
La zona se mantiene acordonada y hasta allí se han trasladado ambulancias, bomberos, Policía Local y Nacional, SOS Rioja y Cruz Roja, entre otros recursos; así como el alcalde de Logroño, Conrado Escobar.
El colegio Purísima Concepción y Santa María Micaela, conocido como Adoratrices, se encuentra situado en la calle peatonal Juan XXIII y oferta Educación Infantil, Primaria y Secundaria, Formación Profesional Básica y los grados medios de Peluquería y Estética.