Las autopistas del agua salvan a Marruecos
Los embalses superan más de la mitad de su capacidad gracias a una jugada maestra.
El reino alauí ha llevado a cabo un proyecto para garantizar el abastecimiento de agua en Rabat y Casablanca, mediante la conexión de dos de los ríos más importantes del país, y que han conseguido llevar agua a las presas de Sidi Mohamed Ben Abdellah y de El Massira.
Desde agosto, que comenzó esta iniciativa, se han podido transferir 110 millones de metros cúbicos de agua, una cifra altísima, teniendo en cuenta que la presa de Sidi Mohamed Ben Abdellah tiene una capacidad total de 180 millones de metros cúbicos, ha explicado el ministro de Equipamiento y Agua marroquí, Nizar Baraka, ante la Cámara de Representantes, según Atalayar.
Este proyecto fue pensado en 2021 y fue reanudado por el actual gobierno con 6 mil millones de dírhams de coste. El Ministerio de Agricultura, en colaboración con la Oficina Regional para el Desarrollo de Gharb, fue el encargado de desarrollar el proyecto bajo el nombre de "autopistas del agua" con una longitud de más de 66 kilómetros.
Las consecuencias de no haber llevado a cabo la conexión de las masas de agua hubiese reducido los embalses a 70 millones de metros cúbicos, que hubiesen desembocado en cortes del agua a las ciudades de Casablanca y Rabat.
La prioridad para las instituciones son “garantizar la flexibilidad y una mejor gestión de las estructuras hidráulicas, garantizar el abastecimiento de agua potable en las regiones costeras y apoyar el desarrollo socioeconómico de las mismas, y optimizar la gestión de los recursos mediante el uso eficaz de las plantas desaladoras”, entre otras.
Este país es pionero en el continente africano y cuenta con una gran capacidad de anticipación a los desafíos, y ha logrado evitar lo que podría haber sido una grave crisis para dos de sus ciudades más importantes.
El objetivo del gobierno es construir 179 grandes presas para el año 2027, además de una veintena de plantas desalinizadoras para el 2030. Gracias a las plantas desaladoras se espera obtener más de 1.000 millones de metros cúbicos.