Alarma ante la falta de refugios en caso de catástrofe nuclear: menos del 1% de la población tiene hueco ante un ataque
Muchos países incluyen por primera vez en sus agendas políticas el término "refugio antiatómico".
Desde el inicio de la guerra en Ucrania, la expresión ataque nuclear aparece de forma intermitente en los medios de comunicación. Además, en la agenda política de muchos países se manifiesta, por primera vez, el término "refugio antiatómico". ¿Estamos preparados para un ataque con armas nucleares?
Según el medio alemán Westdeutscher Rundfunk (WDR), estos refugios públicos "incluyen búnkeres altos y bajos, así como antiguos sistemas de túneles". "Estos espacios se construyeron principalmente durante la Segunda Guerra Mundial con fines de protección contra ataques aéreos".
Además, "las estructuras civiles, como los aparcamientos subterráneos o las estaciones de tren, que se construyeron después de la guerra, están equipados de tal manera que no sólo podían cumplir su propósito real, sino también como refugio para la población en caso de crisis", celebra la publicación.
En Alemania, actualmente existen unos 579 refugios públicos destinados exclusivamente a la protección civil en casos de catástrofe. Según la Oficina Federal de Protección Civil y Asistencia en Casos de Desastre (BBK), del país, 580.000 personas podrían encontrar protección, es decir, un 0,5% de la población.
De acuerdo a una publicación del diario As, en España, no hay datos reales sobre la existencia de estos espacios. Sin embargo, "las empresas constructoras empezaron a recibir encargos para la construcción de refugios privados, con el objetivo de poder protegerse en caso de que la guerra llegue a territorio nacional".
"El 70% de nuestros clientes quiere un búnker por temor a que la guerra llegue a España", señalan fuentes de la empresa ABQ al periódico. "El coste de un refugio de 25 plazas supera los 60.000 euros, y de 50 personas 71.000".