PP y Vox pactan eliminar las banderas LGTBI y las concentraciones contra la violencia machista en Náquera (Valencia)
Sustituirán las concentraciones de 'no a la violencia machista' por "'no a la violencia' o 'condenamos toda violencia'".
Mientras María Guardiola, candidata del PP a la Junta de Extremadura, se niega a meter en su eventual Gobierno a dirigentes de Vox porque, afirma, no puede dejar entrar en él "a quienes niegan la violencia machista, a quienes deshumanizan a los inmigrantes y despliegan una lona y tiran a una papelera los derechos LGTBI"; su propio partido acuerda medidas completamente opuestas al otro lado del país.
Concretamente, en Náquera (Valencia), donde el PP de esta localidad ha pactado con la formación de extrema derecha, ganadora de las elecciones, un documento de medidas entre las que se incluye la retirada de banderas LGTBI de los edificios oficiales y sustituir las concentraciones contra la violencia machista por actos "contra toda violencia" o "contra la violencia".
Así se desprende del acuerdo que Vox ha compartido en sus redes sociales y que ha permitido la investidura de Iván Expósito como alcalde de este pueblo de 7.700 habitantes el pasado sábado. Vox ha obtenido 4 concejales y el PP, 3 en las elecciones municipales del pasado 28 de mayo.
Entre los puntos del acuerdo se encuentran la "promoción de los valores constitucionales" y el compromiso de no colocar banderas LGTBI en balcones y fachadas de instalaciones municipales.
El punto 16, además, incluye: "Sustituir las concentraciones de 'no a la violencia machista' por 'no a la violencia' o 'condenamos toda violencia'.
Otros puntos son la "celebración del día de la Constitución y la Hispanidad" en el municipio, en alusión al 6 de diciembre y al 12 de octubre, o el "ajuste de la política de subvenciones municipal" con la "supresión de aquellas que no tengan una marcada función social, deportiva, cultural" y de las destinadas "a financiar entidades independentistas y pancatalanistas".
También se establece como punto del acuerdo el "recorte del gasto político socialmente improductivo, revisando las partidas de publicidad institucional y gastos superfluos", y la delegación de competencias en materia de comunicación institucional, redes y prensa estará en manos de una concejal de Vox.
Además, se acuerda la "neutralidad institucional en el ámbito cultural", la "defensa de las tradiciones y cultura valenciana así como de las fiestas populares del municipio" y la "defensa de la propiedad frente a la ocupación ilegal".
En el equipo de Gobierno, uno de los cuatro concejales de Vox tendrán las competencias de Tradiciones y Festejos Taurinos, Comunicación Institucional, Protocolo, Patrimonio, Aguas, Agricultura, Caza y Ganadería.
Otro de ellos contará con las competencias de Administración Local, Familia, Vida y Tercera Edad, Urbanizaciones y Nuevas Tecnologías, mientras que el tercero de los ediles tendrá Bienestar Social, Recursos Humanos, Sanidad, Educación y Atención al Ciudadano y el alcalde tendrá competencias de Hacienda, Seguridad Ciudadana y Régimen Interior.
Entre los concejales del PP se repartirán las competencias de Urbanismo, Obras Públicas, Servicios municipales, Deportes, Parques y jardines, por una parte, Emergencias, Juventud, Cultura y Fiestas, por otra y, por último, Turismo, Empleo, Desarrollo Local, Comercio, Industria y Ferias.
Desde el PSPV-PSOE de Náquera han considerado que este acuerdo es "el pacto de la vergüenza y del odio", fruto de "la dupla de la derecha y la extrema derecha que convierte a Náquera en laboratorio de las políticas de discriminación hacia los colectivos víctimas de mayor violencia".
Asimismo, han invitado a los vecinos de la localidad a colocar banderas arcoíris en sus balcones y ventanas, "con los colores que el nuevo gobierno niega a toda la sociedad".