¿Por qué este año Galicia y País Vasco no han convocado elecciones al mismo tiempo?
Las últimas cuatro citas electorales en los dos territorios han coincidido en la fecha de convocatoria. Este año, Rueda y Urkullu han decidido ir por libre
Más de 2,7 millones de gallegos están citados este próximo domingo 18 de febrero para votar en las elecciones de su Comunidad Autónoma. De sus resultados dependerá si el popular Alfonso Rueda repite como presidente de la Xunta o si vuelve a forjarse una alianza de izquierdas liderada, presumiblemente, por la candidata del BNG Ana Pontón.
Los comicios se celebran este 18 de febrero porque Rueda decidió adelantar unos meses la cita con las urnas. Las últimas elecciones en este territorio tuvieron lugar en julio de 2020, en plena pandemia del coronavirus, por lo que se podría haber alargado la legislatura hasta finales de junio. Sin embargo, el líder gallego quiso aprovechar el desgaste político que está sufriendo el Ejecutivo de Pedro Sánchez por la ley de amnistía para intentar prolongar la mayoría absoluta que ya ostenta, dado que cuenta con 42 diputados de los 75 que conforman el hemiciclo autonómico.
Hace cuatro años, las elecciones gallegas coincidieron también con las elecciones vascas. Algo que se ha repetido hasta en las cuatro últimas convocatorias electorales de ambas CC.AA. En 2009, 2012, 2016 y 2020, Galicia y País Vasco acudieron a votar el mismo día.
Sin embargo, este 2024 Galicia vota en febrero y el País Vasco más adelante, previsiblemente en junio para hacerlas coincidir con las europeas. Pero, ¿eso es posible? Estas dos regiones siempre han votado en jornadas diferentes a la mayoría de territorios porque "el reloj de la democracia autonómica" se puso en marcha antes para gallegos y vascos que para el resto. Mientras que la mayor parte de las regiones no votó para establecer la composición de sus parlamentos hasta mayo de 1983, País Vasco lo hizo en marzo de 1980 y Galicia en octubre de 1981.
Cuando en 2009 Touriño convocó elecciones en Galicia, Ibarretxe hizo lo propio por mero cálculo electoral: no quería que Zapatero y Rajoy hicieran una intensa campaña en el País Vasco. Y, desde entonces, ambas regiones han hecho coincidir sus comicios. Hasta este año. Sin embargo, nada obliga a ambos territorios a celebrar elecciones el mismo día. De ahí que Íñigo Urkullu, en este caso, no haya decidido seguir el plan de Rueda y esperará a agotar la legislatura en junio.