Ni Madrid ni Barcelona: la prensa internacional alerta de la subida implacable de la vivienda en esta zona de la península
La subida descontrolada de precios en Portugal hace casi imposible el acceso a la vivienda.
La crisis inmobiliaria ha sido un problema persistente a nivel global desde la crisis de 2008, con los precios de las viviendas alcanzando mínimos históricos entre 2012 y 2020. Sin embargo, en los últimos años, una serie de factores han impulsado un aumento constante en los precios, sin señales de desaceleración en el corto plazo.
A pesar de que la crisis inmobiliaria afecta a varios países de manera similar, la situación en Portugal ha captado la atención de la prensa internacional por su severidad. La notoriedad turística de ciudades como Madrid y Barcelona podría estar eclipsando la realidad vivida en Lisboa y Oporto, donde los precios de la vivienda han crecido de forma casi descontrolada.
Datos del portal Idealista muestran que, en julio de 2024, el precio medio de la vivienda en España era de 2.153 euros por metro cuadrado, en comparación con los 2.654 euros por metro cuadrado en Portugal. La diferencia es aún más marcada en las capitales: mientras que en Madrid el metro cuadrado ronda los 3.500 euros, en Lisboa supera los 5.600 euros, lo que representa casi un 38% más.
Además de Lisboa, Oporto se posiciona como la segunda ciudad más cara de Portugal, con precios superiores a los 3.560 euros por metro cuadrado, superando también a Madrid y a ciudades como Funchal, en la isla de Madeira.
Este aumento sostenido en los precios ha generado preocupaciones sobre una posible burbuja inmobiliaria, que podría desencadenar repercusiones económicas similares a las de 2008.
El impacto de esta crisis se siente especialmente en el mercado de alquiler. En Portugal, el salario mínimo resulta insuficiente para hacer frente a los altos costos de la vivienda. En Lisboa, el precio del alquiler alcanza los 21,5 euros por metro cuadrado, seguido de Oporto (17,4 euros/m²) y Funchal (14,6 euros/m²). En comparación, los precios en ciudades más económicas como Castelo Branco (6,8 euros/m²) y Viseu (7,2 euros/m²) revelan una disparidad significativa en relación con la media salarial.
La creciente preocupación por la inaccesibilidad de la vivienda en Portugal ha llevado a la prensa internacional a subrayar la urgente necesidad de encontrar soluciones que garanticen la accesibilidad habitacional y eviten una nueva crisis económica.