España y Marruecos no concretan la apertura de aduanas en Ceuta y Melilla: hay calendario pero sin plazos
Fuentes españolas explican que esta falta de concreción se debe a motivos de seguridad.
De momento, seguirán en fase de prueba. Eso es lo que han acordado España y Marruecos en la cumbre celebrada esta semana en Rabat sobre las aduanas en la frontera de Ceuta y Melilla.
Según informan distintas agencias, en la declaración conjunta que han suscrito el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el primer ministro marroquí, Aziz Ajanuch, los dos gobiernos "reiteran su compromiso con la plena normalización de la circulación de personas y mercancías de manera ordenada, incluyendo los dispositivos adecuados de control aduanero y de personas a nivel terrestre y marítimo".
Es decir, no se menciona explícitamente a ambas ciudades ni se concreta una fecha para esa apertura. Una falta de concreción que fuentes españolas explican que se debe a motivos de seguridad.
La prueba piloto del 27 de enero
En este sentido, España y Marruecos "tienen en cuenta las conclusiones de la prueba piloto del 27 de enero" en la nueva aduana de Ceuta, donde antes no existía una, y en la de Melilla, que cerró unilateralmente Rabat en 2018, y han acordado seguir "esta serie de pruebas conforme al calendario acordado para superar cualquier posible eventualidad".
En la declaración de la cumbre, se menciona la existencia de un calendario, aunque no se especifican plazos concretos para esa apertura que los dos países desean que sea "ordenada y progresiva", en palabras del propio Sánchez que precisamente ha reconocido que esta cuestión es "muy importante para España" y se ha felicitado del éxito de la primera prueba piloto.
Ceuta y Melilla realizaron ese día las primeras pruebas piloto para establecer en las dos ciudades autónomas aduanas comerciales con Marruecos. En Ceuta sería la primera vez que exista un aduana comercial, mientras que en Melilla se reabriría cuatro años y medio después de que fuera cerrada de manera unilateral por Marruecos.
Fuentes del Gobierno restan importancia al hecho de que no se cite explícitamente a Ceuta y Melilla y subrayan que es evidente que se está hablando de las dos ciudades.
El Gobierno ha venido defendiendo que la apertura de las aduanas es un reconocimiento por parte de Marruecos de las fronteras españolas, incluidas Ceuta y Melilla, ya que solo hay este tipo de instalaciones con otros países.
Albares ha venido defendiendo todo este tiempo la voluntad de los dos países de que "sea una apertura ordenada y gradual", porque se quieren evitar "imágenes del pasado" y evitar la vuelta del llamado "comercio atípico".