"Es un palo": Yunquera y El Burgo, consternados por la detención de su cura por agresión sexual
"Nos lo hemos tomado muy mal, nadie se puede imaginar una cosa así", explican los vecinos de las localidades malagueñas, que nada sospechaban del ahora detenido.
Los pequeños municipios malagueños de Yunquera y El Burgo están consternados tras la detención del sacerdote de 34 años que les decía misa y que ha ingresado en prisión acusado de agredir sexualmente a al menos cuatro mujeres a las que sedó y grabó.
Los vecinos de Yunquera, localidad de unos 2.800 habitantes ubicada en la Sierra de las Nieves, a una hora en coche de Málaga, se han despertado con la sorpresa de la detención del cura después de que hace unas semanas comunicara que por motivos personales se tenía que ausentar y no iba a seguir oficiando la misa, según ha explicado a EFE el alcalde José María Rodríguez.
"Es un palo", ha lamentado el regidor, que ha reconocido que estaban muy contentos de que hace unos meses llegara al pueblo un nuevo cura, que podía traer nuevas ideas, propuestas e intenciones.
Rodríguez ha explicado que no solo estaba en este municipio, sino que también era cura en la localidad vecina de El Burgo, donde la noticia también ha sorprendido a los vecinos.
Todo asombro
Una vecina de Yunquera ha dicho a EFE que cuando el cura dijo que se tenía que ausentar por motivos personales creyeron que se debía a algún asunto en Melilla, ya que anteriormente estuvo destinado allí.
"Nos lo hemos tomado muy mal, nadie se puede imaginar una cosa así", ha asegurado otra vecina, que ha lamentado que no hubiera colgado los hábitos antes "porque gente así hace mucho daño a la Iglesia, por cuatro personas de este tipo se mancha toda la institución", se ha quejado.
Respecto al contacto que ha podido tener con las mujeres de Yunquera, el alcalde ha sostenido que cree que ha sido poco y que por tanto esperan que no haya ninguna víctima en la localidad.
"Desde el Ayuntamiento estamos abiertos a colaborar con la Guardia Civil para ver las imágenes y si reconocemos a alguna afectada", ha señalado el regidor, que ha admitido que el detenido "últimamente estaba un poco nervioso porque veía que el caso estaba encima de la mesa".
Seis años como sacerdote
El investigado, Francisco J.C., ha ingresado en prisión provisional por cuatro agresiones sexuales y cinco delitos contra la intimidad. Fue ordenado sacerdote en 2017, fue párroco en una iglesia de Melilla y a comienzos de año fue destinado a la Diócesis de Málaga.
Al parecer, al sacerdote le asignaron un nuevo destino al tener sospechas el obispado de que mantenía una relación amorosa con una mujer. No hubo medidas sancionadoras de ningún tipo, sólo un traslado.
El sacerdote, natural de Vélez-Málaga, ha sido detenido en este municipio de madrugada por la Policía Nacional, que cree que agredió sexualmente a las mujeres tras sedarlas, por lo que ellas no eran conocedoras de lo sucedido.
Fuentes cercanas a la investigación han señalado a EFE que algunas de las agresiones fueron cometidas en una casa parroquial y en su propia casa. No se ha podido determinar por ahora qué sustancia utilizó el detenido para drogar a las mujeres, ya que han pasado varios años desde que se cometieron los hechos.
El detenido no ha querido colaborar con la Policía tras su detención, según las mismas fuentes.
El hijo de una monja
Este veleño es hijo de una monja clarisa que durante años estuvo en Vélez-Málaga. Posteriormente, la mujer permaneció como catequista hasta que nació el ahora detenido y comenzó a trabajar como educadora en una guardería, han indicado los vecinos.
La investigación se inició en el mes de agosto, cuando una mujer, que aseguró ser pareja sentimental del detenido, denunció en la Unidad de Familia y Atención a la Mujer (UFAM) de Melilla que había localizado en el domicilio que compartían un disco duro con fotografías y vídeos.
En ellos aparecían varias mujeres semidesnudas, dormidas o bajo los efectos de algún sedante y a las que un hombre les realizaba todo tipo de prácticas sexuales.
Tras el análisis del material de este disco duro, los investigadores de la UFAM central lograron identificar a varias víctimas que manifestaron desconocer la existencia de las grabaciones y que no eran conscientes de haber sido víctimas de ningún delito de naturaleza sexual.
Los agentes averiguaron que las agresiones sexuales se habían llevado a cabo de forma continuada en diferentes años y localidades, con ocasión de viajes de grupos de amigos, entre los que se encontraba el arrestado.
Los agentes no descartan que haya más víctimas en Melilla, Málaga o Córdoba, lugares en los que el arrestado ha residido, por lo que siguen analizando el material que se incautaron en su actual domicilio de Vélez-Málaga tras la detención.