El dron suicida español se abre mercado
Una nueva oportunidad para la industria de defensa española.
En una época marcada por el fortalecimiento de la industria de la Defensa, las empresas españolas siguen intentando hacerse su hueco en el mercado internacional. La empresa española Arquimea, por ejemplo, tal y como destacan en El Debate, busca destacarse en el ámbito de la tecnología militar con el desarrollo del Q-SLAM-40, un dron kamikaze.
EL Q-SLAM-40 es conocido por tratarse de un sistema como munición merodeadora y combina las capacidades de los vehículos aéreos no tripulados (UAV) con la precisión de las municiones inteligentes.
El dron español se distingue por un diseño ligero y portátil, con un peso total de solo 28 kilos. Un militar podría llevar encima hasta tres. El dron tendría que ser operado, eso sí, por un equipo de dos personas, algo que sin embargo facilita su despliegue en diversos escenarios de combate. Además, gracias a su motor silencioso y un perfil compacto, puede pasar desapercibido fácilmente, aumentando así su efectividad.
Según destaca la empresa encargada de su fabricación, este dron es ideal para misiones de corto alcance y operaciones especiales. Su capacidad para volar a bajas altitudes y su precisión en ataque permiten a las fuerzas armadas llevar a cabo misiones con un alto nivel de éxito y mínimo riesgo para el personal.
Por todo ello, el Q-SLAM-40 no solo es, según Arquimea, un avance tecnológico en defensa, sino que también supone un importante impulso para la industria española.de las fuerzas armadas ante los desafíos del siglo XXI.
