Víktor Yanukóvich
Órdago a Ucrania
Ha sido increíble la rapidez con la que Putin ha desplegado sus tropas en la península de Crimea. Primero a hurtadillas para ganar tiempo y luego exhibiendo a plena luz del día los pasamontañas, los kaláshnikov, el tintineo de cartuchos y granadas. El resto del mundo cuelga flácido.
De parte de una ucraniana en París: cuando mi país se rebela
Ya no se trata de protestas; esto es una revolución. El pueblo sabe que nadie le regalará sus derechos, que hay que ir a buscarlos. Los ucranianos no apoyan a líderes de la oposición débiles como Klitchko, que recomienda "mantener la calma" en un momento en el que ya es imposible.