Hasta los hijos del magnate han tenido que mediar entre la neofascista y Forza Italia para calmar los ánimos, cuando llega la semana decisiva de la formación de Gobierno.
La ganadora de las elecciones coloca a su mano derecha en el Senado de Italia y negocia con la derecha los ministerios con la premisa de "cumplir" su programa.
El exmandatario ha escenificado su malestar con la líder de Hermanos de Italia, al impedir a los miembros de su partido, Forza Italia, votar como presidente del Senado al candidato de Meloni, Ignazio La Russa.
El ex primer ministro italiano cree que las tropas rusas "deberían haber llegado a Kiev en una semana" para "reemplazar el gobierno de Zelenski por uno de gente decente".
Entrevista con Matteo Re, profesor de la Universidad Rey Juan Carlos, sobre la previsible victoria de Giorgia Meloni en las elecciones del 25 de septiembre.
Es la cara ‘dulce’ del posfascismo italiano, y ella misma avisa: el tono agresivo no le gusta, pero el contenido (antiderechos LGTBI, antifeminista, antimigrantes) es el que es.