Dar la bienvenida a Miguel Ríos al Seiscientos de Autoentrevistas.com es de las cosas que más feliz le pueden hacer a uno. Ha dejado una huella imborrable en el programa que es mayor si va seguido de un paseo con Wyoming al volante y de un directo de Miguel Ríos con Wyoming y Los Insolventes en el estudio.
Los mismos profesores que presumen de que la universidad es un "régimen feudal" en el que las relaciones se basan en la idea de "sumisión a cambio de protección", o que utilizan esa jerarquía anclada en el tiempo para mirar a otro lado cuando hay abusos y acoso en su universidad, se escandalizan cuando un rockero obtiene un reconocimiento que quizás ellos no logren nunca.
Randy California, líder de la banda Spirit, siempre defendió que Led Zeppelin había tomado su canción Taurus como base para el inicio de Stairway to Heaven; la escucharon por primera vez en 1968, a lo largo de una gira en que actuaron como teloneros para Spirit, y la emplearon sin advertirlo tres años después en el que sería su mayor éxito.
Quique González cogió una raqueta de pequeño, imaginando que era una guitarra, y nunca la soltó. Lo suyo tiraba más por la música que por el deporte, aunque el fútbol no se le daba nada mal. He leído que una lesión le truncó el sueño de ser un galáctico, vestido de blanco y no precisamente de novia.
De Shakespeare a Manhattan, el camaleón de Brixton, por cuyas venas corría sangre irlandesa, le dio una lección a la pedantería musical haciendo uso y abuso del sintetizador para preparar aquellos cócteles contraculturales con mucho glam, rock progresivo y hard rock, entre un lord Alfred Douglas rubio y un Supermán fitness que gustaba a mujeres y a hombres.