Pornografía política
Es difícil concentrar en una conversación de despacho tanta pornografía política como la que contiene las conversaciones del Ministro del Interior con el director de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel de Alfonso, desveladas por el diario Público. Y es difícil entender cómo, horas después de estallar el escándalo, tanto Fernández Díaz como Rajoy siguen creyendo innecesario no ya dimitir, sino al menos dar explicaciones que no sean un insulto a la inteligencia de los ciudadanos.