Habrá clases de empatía, confiscación de teléfonos móviles en casos graves, exclusión de alumnos que acosen en las redes... Un trabajo común de varios ministerios para una "lucha sin cuartel".
El Gobierno defiende como puede la reforma de las pensiones y asegura que "no hay vencedores ni vencidos", mientras la oposición llama a protestar en las calles.
Aunque se les ha citado para que haya paz social en otras materias laborales, las centrales insisten: que se suspenda el retraso de la edad de jubilación a 64 años.
La reforma de las pensiones no se toca, pero Borne trata de retomar la paz social con otras negociaciones paralelas. "Tenemos que calmar la situación", reconoce.
El presidente galo, victorioso tras una doble moción de censura, dice que "hay que escuchar la cólera" de los ciudadanos, pero no tolerará un desbordamiento".
La edad mínima aumentará de los 62 hasta los 64 años y suben los mínimos para los nuevos jubilados hasta los 1.200 euros netos mensuales en 13 mensualidades.
Parece poco probable que funcionen, pero la alianza de izquierdas y la extrema derecha evidencian las fuertes fricciones que tiene Élisabeth Borne con la oposición.
La solvente y discreta Élisabeth Borne, extitular de Trabajo y la segunda mujer nombrada para el cargo en Francia, supone un guiño de cara a las legislativas de junio.