crianza

No, ser mamá no siempre es 'natural'

No, ser mamá no siempre es 'natural'

Como hija independiente y dotada de una trayectoria considerada ejemplar, pensaba que sabía controlar todos los mandos de mi existencia y que podía planificarla a mi antojo. Hasta el día en que la medicina me anunció que mis posibilidades de quedarme embarazada se aproximaban a cero.
10 cosas que hay que plantearse antes de tener hijos

10 cosas que hay que plantearse antes de tener hijos

No tengo la intención de decirle a nadie que no merece la pena, porque la verdad es que sí la merece. Solo pretendo prepararos. No es como comprarse un pez o adoptar un perro. Es un ser humano. No hay segundas oportunidades. Aprenderéis muy rápido a ver el mundo con otros ojos. Hacedlo.
Carta abierta de disculpa por mi hija de dos años

Carta abierta de disculpa por mi hija de dos años

Hay días mejores que otros. Los hay que nos sentimos desamparadas y que nos preguntamos en qué punto lo hemos hecho mal. Pensamos en lo que podría haber pasado, en lo que deberíamos haber hecho de otra manera; y otras veces ponemos excusas y tiramos de verdades inamovibles como "es la edad" o "es una fase"...
Miedo a ser niños

Miedo a ser niños

Cuentan los libros de historia que los fenicios, en los albores del patriarcado, adoraban a un dios a quien sacrificaban a sus hijos e hijas. Los bebés y niños eran introducidos en la boca de la estatua hueca de Moloch, desde donde caían hasta su vientre de fuego para «alimentarlo».
Queridos padres: dejad de rescatar a vuestros hijos

Queridos padres: dejad de rescatar a vuestros hijos

La próxima vez que quieras salvar a tu hijo de perder el autobús, de rasparse las rodillas o de que su ego salga herido, recuerda que es posible que le estés privando de la mejor lección que podría recibir: el poder de saber que sus actos tienen consecuencias y que es el responsable de las decisiones que toma.
Si tienes hijos, la has cagado

Si tienes hijos, la has cagado

Quiero a mis hijos y, de volver atrás, escogería tenerlos de nuevo, pero no es fácil. A veces me cabreo. Con ellos, conmigo y con el puñetero sistema. Y les grito. Y luego me siento fatal y lloro. No por mí, por ellos. Por no ser la madre que se merecen. La paciente y cariñosa, la que hace tartas y siempre está de buen humor.
Antes de ser una madre consciente

Antes de ser una madre consciente

¿Qué tienen los bebés recién nacidos que, aunque sean del tamaño de una hogaza de pan, cambian la energía de una habitación cuando están presentes? A todos nos atraen, incluso a ese tío que habla a gritos o se pasa de intensidad con las palmaditas en la espalda. Cuando estamos al lado de uno, hablamos en susurros, dejamos una luz tenue y le miramos a los ojos.