Dormir permite al servicio de limpieza cerebral efectuar su trabajo para poder recoger la basura cerebral y poder recomenzar un nuevo día con la mente en forma.
Conseguir una mayor atención, mayor creatividad y un óptimo rendimiento podría pasar por controlar la comida, la bebida, el sexo y las relaciones sociales.
En el cerebro existe una barrera, conocida como barrera hematoencefálica, que limita enormemente el intercambio de sustancias entre la sangre y dicho órgano.