Un nuevo estudio relaciona el deporte con las zonas del cerebro del aprendizaje y la memoria
Y no tiene por qué ser ejercicio intenso.
Mens sana in corpore sano decía la cita de Décimo Junio Juvenal en una de sus sátiras. Lo cierto es que esta afirmación no solo se relaciona con trabajar el cuerpo y la mente por separado, los estudios recientes apuntan a que la actividad deportiva ayuda también con la memoria y el aprendizaje.
Según una investigación del Centro de Salud Cerebral del Instituto de Neurociencia del Pacífico (PBHC) del Centro de Salud Providence Saint John y de la Universidad de Washington en St. Louis, las personas analizadas que realizaban regularmente deporte (ya fuera caminar, correr, etc.) tenía volúmenes cerebrales más grandes en las áreas de memoria y aprendizaje como son el hipocampo y el área de "toma de decisiones".
Esto se descubrió gracias a la realización de resonancias magnéticas a 10.125 personas participantes."Descubrimos que incluso niveles moderados de actividad física, como dar menos de 4.000 pasos al día, pueden tener un efecto positivo en la salud del cerebro", señala uno de los investigadores, David Merrill del PBHC, al Journal of Alzheimer's Disease.
"Esto es mucho menos que los 10.000 pasos que se sugieren a menudo, lo que lo convierte en un objetivo más alcanzable para muchas personas", añade.
Además, recalca que, aunque el aumento de volumen no está relacionado con un mejor funcionamiento, pero sí habría indicios para ello. Tal y como recuerdan, el ejercicio mejora el flujo sanguíneo en todo el cuerpo y aumenta los niveles de ciertas proteínas que mantienen sanas las neuronas.
"Nuestra investigación respalda estudios anteriores que muestran que estar físicamente activo es bueno para el cerebro", afirma al citado medio el radiólogo Cyrus Raji de la Universidad de Washington en St. Louis. "El ejercicio no sólo reduce el riesgo de demencia sino que también ayuda a mantener el tamaño del cerebro, lo cual es crucial a medida que envejecemos", añade.