Una técnica nutricionista te enseña a introducir el aguacate en tu dieta sin miedo a las grasas

El aguacate es uno de esos alimentos que genera debate debido a su alto contenido de grasas. Sin embargo, "lejos de ser perjudicial, este fruto está repleto de nutrientes que pueden ayudarte a mejorar tu salud si se consume de forma adecuada", asegura la técnica en Nutrición y Dietética Ana Luzón. Así que olvídate del miedo a las grasas y descubre, de la mano de esta experta, cómo el aguacate puede ser un excelente aliado en tu dieta. 

"El aguacate tiene grasas saludables. Es especialmente rico en grasas monoinsaturadas, principalmente ácido oleico, el mismo tipo de grasa que encontramos en el aceite de oliva", asegura Ana Luzón. "Este tipo de grasa ha sido ampliamente estudiada y se ha asociado con la mejora de la salud cardiovascular, ya que ayuda a reducir los niveles de colesterol "malo" (LDL) y aumentar el colesterol "bueno" (HDL)". 

Otro aspecto positivo de este alimento es su contenido en nutrientes esenciales. "Además de las grasas saludables, el aguacate es una fuente excelente de vitaminas y minerales como la vitamina E, potasio, ácido fólico y fibra". Estos nutrientes "no sólo son clave para mantener una piel saludable y un sistema inmunológico fuerte, sino que también favorecen la digestión y el equilibrio de electrolitos", añade Luzón. 

También es aconsejable para el control del peso y saciedad. "Porque, a pesar de su densidad calórica, el aguacate puede ser un gran aliado para quienes buscan controlar su peso. Esto se debe a su alto contenido en fibra y grasas saludables, que ayudan a prolongar la sensación de saciedad, evitando los picos de hambre que suelen llevar a comer en exceso. 

¿Cómo integrarlo de forma equilibrada en tu dieta? Pues, aunque el aguacate es beneficioso, "la clave está en la moderación", insiste esta experta. "Una porción adecuada es entre 1/4 y 1/2 aguacate al día, según las necesidades de cada persona. Puedes incorporarlo en ensaladas, tostadas integrales o como parte de batidos saludables", aconseja.

 Además, nos recuerda que "es perfecto como sustituto de grasas menos saludables, como la mantequilla o el aceite refinado". Al consumirlo de forma moderada y como parte de un patrón alimentario saludable, "estarás ganando en salud, no solo a nivel de control de peso, sino también en el cuidado del corazón y el bienestar general", añade. 

Sin embargo, Luzón también advierte que puede tener algunos efectos adversos si se consume en exceso, más allá de su contenido calórico, que son los siguientes. Por un lado, el exceso de potasio. "El aguacate es rico en potasio, un mineral esencial para la función cardíaca y el control de la presión arterial. Sin embargo, en personas con problemas renales, consumir demasiados aguacates podría provocar una acumulación excesiva de potasio en sangre (hiperpotasemia), lo que puede ser peligroso para la salud del corazón. Interacción con ciertos medicamentos. Las personas que toman medicamentos anticoagulantes como la warfarina deben tener cuidado con el consumo excesivo de aguacates, ya que podrían interferir con el efecto del fármaco debido a su contenido en vitamina K", explica la nutricionista. 

También puede provocar malestar digestivo. "Porque aunque el aguacate es una buena fuente de fibra, consumir demasiada fibra a través de este alimento puede causar hinchazón, gases o malestar intestinal, especialmente en personas con síndrome del intestino irritable (SII) o problemas digestivos", destaca la nutricionista.

Y, finalmente, puede dar una reacción alérgica. "Aunque ocurre en raras ocasiones, algunas personas pueden ser alérgicas al aguacate", señala Luzón. Así que," en casos severos, el abuso de este alimento puede agravar una reacción alérgica, causando síntomas como urticaria, hinchazón e incluso anafilaxis en situaciones extremas". 

Pero, en general, el aguacate es un alimento nutritivo, pero como con cualquier alimento, el equilibrio y la moderación son clave para evitar cualquier posible riesgo a la salud, concluye Ana Luzón.