Una nueva fragata española deja sin palabras en Francia
El buque, equipado con la última tecnología y el sistema de combate más avanzado de Navantia, se convierte en protagonista de la feria Euronaval de París.
La fragata F-110, que Navantia está construyendo para la Armada Española, ha acaparado todas las miradas en el festival Euronaval, uno de los mayores encuentros del sector de defensa naval y que estos días se celebra en París. Este nuevo buque, primero de una serie de cinco cuya construcción se aprobó en 2019, representa un paso adelante en tecnología y diseño naval respecto a la F-111, cuyo montaje se inició en 2022 y que, tal y como señala El Debate, avanza sorprendentemente más rápido de lo previsto.
Las fragatas F-110 están diseñadas para misiones de escolta o defensa y cuentan con capacidades antiaéreas, antisuperficie y antisubmarinas. Cuentan con un mástil integrado que concentra sensores y antenas, así como un espacio multimisión que incrementa su versatilidad. La propulsión híbrida de estas fragatas, más silenciosa y eficiente, representa un hito en ingeniería naval, además de ser muy adecuada para operaciones de sigilo.
Uno de los puntos fuertes de la F-110 es el sistema de combate SCOMBA, desarrollado por Navantia Sistemas para la Armada Española y presente en otras unidades como el L-61 Juan Carlos I y los Buques de Acción Marítima. SCOMBA gestiona un completo sistema de armas, desde misiles y torpedos hasta artillería y señuelos, y destaca por su ciberseguridad avanzada con detección de intrusiones y monitorización en tiempo real, esenciales en el contexto de defensa actual.
Otra característica clave es la avanzada gama de sensores con que están equipadas estas fragatas. Con radares de vigilancia y navegación, sistemas electro-ópticos y capacidades de guerra electrónica, los buques están preparados para detectar y contrarrestar amenazas en entornos hostiles. Además, la F-110 puede establecer enlaces de datos digitales con unidades aliadas, facilitando el intercambio de información táctica y permitiendo operatividad conjunta con fuerzas internacionales.
Con la F-110, Navantia y la Armada Española consolidan su posición en la innovación naval europea, despertando interés y admiración en los foros internacionales y demostrando una vez más su capacidad para crear buques de última generación.