Una multa de 6 euros al día termina con una condena en prisión: "Soy pobre, no puedo pagarla"

Mazazo contundente de la justicia. Un hombre portugués al que se le había impuesto una multa de 1.260 euros acabará ingresando en prisión. Irá a la cárcel por no haber sido capaz de afrontar esa sanción pecuniaria, según recoge el medio luso O Minho. 

Dicha decisión se ha tomado después de que el Tribunal Supremo de Portugal tumbase su recurso de apelación. Todo comenzó cuando dicho individuo fue condenado en 2023, en el juzgado local, por un delito de abuso de confianza agravado, 

Dicho delito fue castigado con una pena de 210 días de multa, a razón de seis euros diarios. No los sufragó y, por tanto, el Ministerio Público luso transformó la sanción en prisión subsidiaria, ordenando cumplir 140 días de cárcel y no suspender la ejecución de la prisión.

"Soy pobre"

El condenado había alegado "extrema insuficiencia económica, prueba suficiente, que demuestra que el motivo del impago no le es imputable". Aquel fue el argumento que esgrimió, pero no convenció al alto tribunal del país vecino. "El plazo de 15 días previsto en el Código de Procedimiento Penal, para el pago de la multa, tiene carácter permanente", recoge la sentencia del Supremo. 

También se expone en el fallo que "la ley impone al condenado la carga de probar la ausencia de culpabilidad en el impago de la multa, ya que es la persona principalmente interesada en evitar las consecuencias del impago y quien está en mejores condiciones para hacerlo, demostrar la ausencia de culpa".