Un policía de Nueva York mata a un menor de 13 años que llevaba una pistola de aire comprimido
La víctima es Nyah Mway, de origen birmano.
Un niño de trece años ha muerto en Utica, al norte del estado de Nueva York (EEUU) debido a los disparos de un agente, según ha informado la propia Policía, que también ha precisado que el menor portaba una pistola de aire comprimido.
La víctima es Nyah Mway, de origen birmano. El niño y otro menor fueron parados por agentes cuando caminaban por la calle sobre las 22.20 horas, según la versión policial, debido a que encajaban con la descripción de unos sospechosos de robo a mano armada.
Un vídeo difundido en redes sociales muestra al niño corriendo por una calle oscura mientras le perseguían tres policías. Durante la persecución, Mway sacó "lo que parecía ser una pistola", ha explicado la policía en un comunicado. Uno de los agentes logra derribar al adolescente y los demás se suman después mientras varios viandantes increpan a los agentes.
Durante el forcejeo en el suelo, un oficial de policía "finalmente disparó su arma de fuego una vez, hiriendo al hombre" en el pecho, ha precisado Mark Williams, el jefe de policía, en una rueda de prensa ofrecida este sábado. Nyah fue trasladado al hospital, donde no se pudo hacer nada por él y falleció. Más tarde, los agentes recuperaron una réplica de una pistola Glock 17 Gen5 con un cargador desmontable.
Protestas por la violencia policial
Ya el sábado la rueda de prensa convocada el sábado por las autoridades para explicar lo sucedido se convirtió en un acto de protesta contra la violencia policial con la asistencia de 50 miembros de la familia del niño fallecido. "Nuestros padres no huyeron de la guerra para que la policía matara a sus hijos", se podía leer en uno de los carteles mostrados.
El jefe de la policía de Utica, Mark Williams, expresó que quieren ser transparentes y relató cómo el menor sacó una pistola imitación a una Glock que luego resultó ser de aire comprimido durante la persecución: "Hay muchas emociones en esta sala, pero cuando nos piden transparencia y nos gritan es muy difícil".
También estaba presente en la rueda de prensa el alcalde de Utica, Michael Galime, quien detalló que se trataba de un registro rutinario que "derivó en tragedia en cuestión de segundos". Además, prometió que se va a publicar la grabación de las cámaras personales que llevaban los agentes.
Los tres agentes se encuentran suspendidos de empleo, no de sueldo, y sus nombres se publicarán "pronto", aseguró el responsable policial, que adelantó que hay una investigación interna en marcha. La Policía ha advertido además de que el vídeo difundido en redes "no refleja el incidente al completo".
