Ucrania acosa a empresas multinacionales
Tras más de un año y medio de guerra, la paciencia ucraniana se agota…
Ucrania se está cansando de ver que, tras más de un año medio de guerra, una cantidad importante de multinacionales continúan operando en Rusia pese a su agresión militar.
Por ello, varias iniciativas están buscando aumentar la presión a esas empresas (tan solo una quinta parte de las multinacionales han abandonado el mercado ruso) para que dejen de financiar indirectamente, a través de sus impuestos, la invasión de Ucrania.
En ese sentido, desde Ucrania piden a los directivos de esas empresas y a los consumidores que actúen conforme a los valores que predican tener y que dejen de comprar los productos de esas firmas.
Para facilitar a los clientes ese 'boicot', se ha creado una aplicación móvil llamada Push to Leave (“empujón para marcharse”, en inglés). La misma puede ser descargada desde cualquier país del planeta y sirve para que, al escanear el código de barras de un producto, se pueda conocer si su fabricante sigue operando aún en Rusia.
Roman, uno de los desarrolladores de la aplicación, destaca en declaraciones a EFE que “nuestro principal objetivo es hacer que estas compañías se planteen si merece la pena invertir en la economía del país agresor”.
En ese sentido, Roman precisa que las multinacionales pagan una importante cantidad de impuestos, por lo que están financiando la guerra contra Ucrania de una manera significativa: “Esto es importante porque estas grandes compañías pagan grandes sumas en impuestos al estado ruso, que se usan para financiar los ataques contra Ucrania”.
Las empresas que siguen en Rusia
Los activistas han dado algunos nombres de las empresas que siguen presentes en el mercado ruso, como la estadounidense Unilever o la francesa Auchan, un tipo de multinacionales que pagaron en Rusia en 2022 impuestos sobre sus beneficios por valor de 3.300 millones de euros.
En concreto, según los datos del Instituto KSE y su proyecto 'Leave-Russia', que cuenta con una de las mayores bases de datos sobre empresas internacionales en Rusia, solo 276 de 1.391 empresas occidentales (el 19,8%) han abandonado por completo Rusia desde el inicio de la invasión.
Además, según el instituto, más de la mitad de esas compañías (el 56%) aseguran que seguirán haciendo negocios en Rusia. Algunas de esas multinacionales, como PepsiCo, P&G o Mars argumentan que no pueden marcharse porque proporcionan productos esenciales.
Sin embargo, la consultora en derechos humanos de la coalición de organizaciones de la sociedad civil 'B4Ukraine', Nina Prusac, subraya que con esta decisión están “priorizando los beneficios” sobre “un comportamiento comercial ético y responsable”.
De hecho desde la plataforma destacan que las galletas y champús difícilmente pueden considerarse esenciales, y que con ello permitieron a las empresas de bienes de consumo estadounidenses generar unos 19.700 millones de euros en beneficios en Rusia en 2022.