Su pareja le engañaba y Zelenski le convenció para ir a la guerra
'Cartelito', como se le conoce por su nombre de combate, viajó desde Bogotá hasta Ucrania para alistarse en la Legión Internacional tras un desamor.
Hay historias que superan todo lo imaginable. Este es el caso de la de Gustavo, conocido ya por su nombre de combate, Cartelito. Este colombiano vivía en Bogotá cuando estalló la guerra en Ucrania. Pero entonces vivía en pareja y aún no imaginaba que los cuernos de su novia le llevarían a alistarse en la Legión Internacional de Ucrania.
"Lo vi en la televisión, estaba con mis padres, y escuché a Zelenski hablar de la Legión Internacional", recuerda en declaraciones al medio El Español. El presidente ucraniano invitaba entonces a todos los combatientes extranjeros a ir a luchar a su país. Pero no fue hasta que descubrió que su novia de entonces se veía con otro hombres que decidió cruzar medio mundo e irse a la guerra. "Me quería morir, esa es la verdad", asegura.
El primer día le entregaron un chaleco antibalas manchado de sangre junto con el fusil, lo subieron a un vehículo y lo llevaron a primera línea en el frente de combate. Sin instrucción previa, sin entender ni una palabra de ucraniano y sin comprender aún dónde se había metido. Cartelito fue oficial del Ejército de Colombia durante ocho años, pero lo que se encontró en Ucrania distaba mucho de la guerra que libró en las selvas de su país.
"Nada más llegar empecé a ver cómo recibíamos disparos de artillería, no paraban en todo el día. Yo nunca había visto algo así, cuando luchaba con el Ejército de mi país no era así", explica. Era julio de 2022, casi dos meses antes de que comenzara la contraofensiva de otoño, y La Legión Internacional le destinó a la unidad "Charlie 3" a la primera línea del frente en Járkov.
Pero el proceso para llegar hasta ahí tampoco fue fácil. Zelenski, en su discurso televisado, no especificó cómo proceder una vez se llegaba a Ucrania. “Unos refugiados ucranianos me metieron en un autobús dirección a Kiev, yo no entendía el idioma”, cuenta. Cuando llegó a la enorme capital, se vio sólo en mitad de la ciudad. "Estuve ocho días buscando a la Legión, y nadie me sabía indicar”, relata. Finalmente le ayudo una mujer desde Brasil –a través de Instagram– y consiguió alistarse.
"Me citaron para el día siguiente, tenía que presentarme en Járkov, y apenas llegué me entregaron un chaleco con restos de sangre y el fusil, y me mandaron para primera línea", recuerda. "Cuando vi el chaleco ensangrentado fue la primera vez que pensé '¿Por qué he venido aquí...?', pero ya había firmado un contrato con la Legión".
Tras nueves meses de guerra, en los que se volvió a enamorar —aunque esta nueva relación tampoco duró— resultó herido, aunque no de gravedad, Cartelito ha decidido ya romper el contrato con la Legión e irse de Ucrania. Ahora su próximo destino es España, donde viajará la próxima semana a Valencia, donde le espera uno de nuevos hermanos de combate y a empezar de cero. Y no viajará solo, lo acompañará Charlie, el cachorro que adoptó en las trincheras. "El también estaba herido, tenía una bala en la cola y una cadera rota de un bombardeo; pero ya se está recuperando y ahora nos tenemos el uno al otro", concluye.