Rusia lleva a una retirada masiva de oro
Movimientos llamativos por parte de los bancos centrales.
El oro ha sido considerado tradicionalmente como un valor refugio de cara a los momentos de inestabilidad económica. Y el actual contexto es precisamente ese, con una guerra en Europa y con una inflación en niveles elevados.
Buena prueba de esta situación es que, según un informe publicado por el Consejo Mundial del Oro, en 2022 la demanda mundial se incrementó un 18% interanual, hasta 4.741 toneladas (un nivel que no se alcanzaba desde 2011). De esa demanda, la parte correspondiente a la inversión en oro alcanzó las 1.107 toneladas, un 10% más en comparación con el año 2021.
Y ahora, todo apunta a que se estaría viviendo un nuevo cambio en cuanto a la utilización del oro como valor refugio. Según el estudio anual de gestión de activos soberanos globales de Invesco, los inversores estarían llevando a cabo una repatriación masiva de las reservas de oro desde Occidente a raíz de la guerra iniciada por Rusia.
En el informe han participado 57 bancos centrales y estrategas pertenecientes a 85 fondos soberanos. Uno de sus bancos centrales (sin identificar) le ha reconocido a Invesco que ha decidido repatriar recursos que tenía almacenados en Londres.
“Hemos transferido nuestras reservas de oro a nuestro propio país para mantenerlo a salvo; su papel ahora es ser un activo de refugio seguro”, ha explicado el banco central. En consecuencia, Rusia, con su invasión militar en Ucrania, estaría provocando una retirada masiva de oro por parte de muchos bancos centrales y fondos soberanos.