Polonia electrifica sus puertas con Bielorrusia
Y también las de la Unión Europea…
Polonia refuerza su seguridad y blinda sus puertas en el actual contexto de tensión con Bielorrusia, un país que está apoyando a Rusia en su invasión militar de Ucrania.
La Guardia Fronteriza de Polonia ha culminado los trabajos para la instalación de una verja electrificada a lo largo de todo el territorio limítrofe con el país presidido por Alexander Lukashenko. Cabe destacar que esa frontera también supone uno de los límites exteriores de la Unión Europea y de la zona de libre circulación del espacio Schengen.
Según un comunicado emitido por la institución, la verja servirá como un “elemento importante” para la protección del territorio nacional, aunque “el elemento más importante” seguirán siendo los propios guardias fronterizos.
Tal y como recoge Europa Press, la valla ha sido levantada a lo largo de los 206 kilómetros que delimitan el territorio nacional de uno y otro país. Además, está equipada con unas 3.000 cámaras de grabación diurna y nocturna, así como térmica.
Su coste aproximado asciende a 343 millones de eslotis, más de 1.500 millones de euros. “La barrera es la frontera en respuesta a la presión migratoria organizada por el régimen bielorruso, que se prolonga desde mediados de 2021”, ha argumentado la Guardia Fronteriza.
Un nuevo gesto de Polonia contra Bielorrusia
Este mismo mes de junio, Polonia ya le cerró las puertas de su frontera a Bielorrusia, aunque por otra vía. Las autoridades polacas decidieron prohibir el paso a los camiones y otros vehículos pesados procedentes tanto de Bielorrusia como de Rusia.
La decisión de restringir el tráfico de mercancías fue anunciada por el Ministerio del Interior de Polonia después de que el Tribunal Supremo de Bielorrusia confirmara una pena de ocho años de cárcel para el periodista de origen polaco Andrzej Poczobut por un presunto delito de odio y otro contra el Estado.
Como consecuencia, inmediatamente, comenzó una disputa entre ambos países por cuestiones fronterizas. En los últimos meses ambos países se han enfrascado en disputas de este tipo, cerrando pasos fronterizos y dificultando la libre circulación de mercancías.
La tensión ha alcanzado su punto más álgido ahora, con la construcción por parte de Polonia de la mencionada verja electrificada en su frontera con Bielorrusia.