"Mataremos a todos": el jefe del Grupo Wagner afirma que ya no toman prisioneros
Prigozhin asegura que "destruirán todo en el campo de batalla", una amenaza que llega entre especulaciones sobre el alcance de los avances logrados.
El jefe del Grupo Wagner, Yevgei Prigozhin, ha afirmado que sus mercenarios ya no están capturando prisioneros en Ucrania y "destruirán todo en el campo de batalla", una amenaza que llega entre especulaciones sobre el alcance de los avances logrados por los dos bandos enfrentados.
Prigozhin se ha pronunciado de esta manera a través de su canal de comunicación y en respuesta a una grabación en la que supuestamente militares ucranianos discuten la ejecución de un mercenario del Grupo Wagner. El oligarca ha acusado a Kiev de violar el Derecho Internacional.
En este sentido, ha defendido que los prisioneros de guerra también tienen derecho a unas condiciones mínimas y ha anunciado que la política actual pasa por evitar las capturas. "Mataremos a todos", ha señalado en un mensaje de voz difundido en Telegram.
El Grupo Wagner se ha convertido en un aliado militar clave para el Kremlin y su presencia ha sido reseñable en zonas estratégicos, como la localidad ucraniana de Bajmut. Para incrementar su personal, la firma de Prigozhin ha recurrido al reclutamiento de miles de presos que cumplían condena en cárceles rusas.
La contraofensiva ucraniana
Prigozhin, además, ha pronosticado este lunes que la contraofensiva ucraniana comenzará en cuanto las fuerzas rusas tomen el bastión de Bajmut, en el Donbás. "En cuanto terminemos de tomar Bajmut, en cuanto expulsemos al último soldado o lo aniquilemos en Bajmut, ese mismo día comenzará la contraofensiva ucraniana", ha afirmado en su canal de Telegram.
A renglón seguido, Prigozhin ha matizado sus palabras al afirmar que cuando dice "ese mismo día" se refiere a un plazo de varios días o incluso una semana. "Pero será muy pronto, porque los ucranianos dispondrán de una gran cantidad de tropas", ha añadido.
Respecto a la posible ofensiva rusa en dirección a Sloviansk y Kramatorsk, los principales bastiones ucranianos en el este del país, ha señalado que "incluso hoy mismo podemos hacerlo, nadie nos impide avanzar al espacio de operaciones, ya que la situación en 10 kilómetros a la redonda de Bajmut no cambiará tras su toma".
El jefe de Wagner ha añadido que en estos momentos las fuerzas ucranianas controlan en Bajmut una superficie de no más de "un kilómetro por dos" y por ello no podrían entorpecer el avance ruso. "Nuestra tarea radica en moler al Ejército ucraniano, no darles la oportunidad de prepararse para la contraofensiva. Lo hacemos con mucho éxito", ha indicado.
Sin embargo, ha alertado de que, tras la toma de Bajmut, "el Ejército ucraniano sin duda aprovechará que Wagner está dentro de la ciudad y nos cortará por los flancos". El presidente de Ucrania, Volodimir "Zelenski, necesitará una gran victoria. Y para ello comenzará la contraofensiva", ha aseverado.