La principal moción de censura contra Macron por la reforma de las pensiones fracasa por nueve votos
Se espera que el presidente dé este martes un discurso oficial al país.
Macron resiste. La primera de las dos mociones de censura presentadas contra el Gobierno francés, la que tenía opciones aritméticas de salir adelante y que se encontraba apoyada por varios partidos, no ha obtenido el respaldo suficiente en la votación de este lunes, aunque se ha quedado a solo nueve votos de lograrlo.
La moción, defendida por el centrista Charles de Courson, ha obtenido 278 votos de los 287 que necesitaba para hacer caer el Ejecutivo de Élisabeth Borne y la reforma de las pensiones impulsada por el presidente, Emmanuel Macron.
La clave ha residido en que la moción de censura no ha contado con el apoyo de la totalidad de los 61 diputados del partido Los Republicanos, una formación conservadora que, aunque no está en el bloque del Gobierno, ha expresado su respaldo a la reforma de las pensiones.
“El Gobierno ya está muerto. Solo han faltado nueve votos para tumbar al Gobierno y su reforma”, ha resaltado tras la votación la diputada de La Francia Insumisa, Mathilde Panot. “La primera ministra (Elisabeth Borne) obviamente debe dimitir”, ha añadido Panot.
La edad mínima aumentará de los 62 hasta los 64 años y suben los mínimos para los nuevos jubilados hasta los 1.200 euros netos mensuales en 13 mensualidades.
La segunda moción de censura tampoco se aprueba
La segunda moción de censura presentada por Unión Nacional, el partido liderado por la ultraderechista Marine Le Pen, tampoco ha sido aprobada.
Tal y como recoge Europa Press, ambas mociones fueron presentadas el viernes, después de que el Gobierno de Elisabeth Borne recurriese al artículo 49.3 de la Constitución, que permite aprobar una iniciativa legislativa sin votación en el Parlamento, pero a costa de abrir la puerta a la presentación de mociones de censura contra el Ejecutivo.
El líder de La Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, tras el rechazo de estas mociones de censura ha subrayado que es necesario una “censura popular” al Gobierno en “cualquier lugar y en cualquier circunstancia”.
Por su parte, la líder ultraderechista Marine Le Pen ha instado a Macron a que “presente otro gobierno a los franceses”. “La crisis no se resolverá si no lo hace”, ha resaltado Le Pen en declaraciones a BFMTV.
Durante las votaciones han proseguido las protestas y movilizaciones que desde hace once semanas sacuden a la sociedad francesa con una manifestación en la plaza Vauban del distrito 7 de París, cerca de la Asamblea Nacional. “Nosotros también vamos a pasar por la fuerza”, “¡Macron dimite!”, han coreado los manifestantes.
