El gesto de Putin que revela la realidad de su relación con China
Cuando tu amigo te hace esperar y no te hace ni pizca de gracia...
El presidente ruso, Vladimir Putin, se ha topado con una situación poco envidiable cuando ha tenido que esperar a tomarse una fotografía conjunta con su homólogo chino, Xi Jinping, durante la cumbre de los BRICS, celebrada en Kazán (Rusia). Para la Federación, esta sigue siendo la reunión internacional más importante desde el comienzo de la agresión en Ucrania, aislado como está el mandatario de buena parte del mundo. Putin quiere usar la cita para convencer a sus aliados de que esos esfuerzos occidentales por bloquear a Moscú han fracasado, pero ha habido un pequeño chasco.
Mientras esperaba al presidente chino, Putin jugueteaba nerviosamente con los pulgares, de pie junto a las banderas rusa y china. Posteriormente, Xi llegó tranquilamente, acompañado de funcionarios del Gobierno y de seguridad, según escribe el tabloide británico Daily Mail. Cuando la pareja se encontró al fin, el rostro de Putin se iluminó con una sonrisa.
No es un incidente aislado. Putin a menudo se encuentra en situaciones en las que tiene que esperar a otros líderes mundiales. En 2023, por ejemplo, tuvo que esperar al presidente egipcio Abdel Fattah el-Sisi mientras se le veía reorganizando torpemente bolígrafos y papeles sobre su escritorio. En 2022, pasó casi un minuto esperando al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, durante una reunión en Teherán. Los medios de comunicación escribieron entonces que el nerviosismo del líder ruso se revelaba en sus gestos. A un líder como él no le gusta esperar.
Aunque Putin intenta presentarse como un líder fuerte, enfrenta presiones derivadas de su posición internacional. Si bien sus relaciones con aliados como China parecen seguir siendo sólidas, esos momentos pueden ensombrecer su autoridad y su posición en el escenario mundial. Anteriormente era el propio Putin quien hacía esperar largas horas a sus invitados para ser recibidos. En el pasado sorprendió al Papa y a la difunta reina británica Isabel II con sus "modales zaristas".
Sobre Ucrania
El presidente chino, ya en harina, pidió posteriormente una reducción de los combates en Ucrania. El primer ministro indio, Narendra Modi, se pronunció a favor de una solución diplomática al conflicto. Sin embargo, ambos países todavía se niegan a condenar a Rusia por la invasión de Ucrania, escriben agencia como AP.
La organización intergubernamental BRICS es considerada un competidor del grupo G7 de países económicamente avanzados. Reúne a Rusia, India, Brasil, China, la República de Sudáfrica y, a partir de este año, otros países, incluidos Irán y los Emiratos Árabes Unidos.
Los comentaristas interpretan la cumbre de Kazán como una prueba del fracaso de los esfuerzos de Occidente por aislar a Rusia, que por orden de Putin lanzó en febrero de 2022 una guerra contra Ucrania, considerada el conflicto más sangriento en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Putin se reunirá con los líderes en Beijing el miércoles. El mismo día también pronunciará un discurso ante los aliados sobre el llamado nuevo plan de la Ruta de la Seda.