Desvelan la misteriosa sombra de Kim Jong Un con libreta
Su presencia ha llamado la atención de todo el mundo.
El periplo del líder supremo de Corea del Norte, Kim Jong Un por Rusia, iniciado el pasado martes con la cumbre en la que se reunió con Vladimir Putin, sigue dejando imágenes de lo más llamativas.
La nula exposición pública y mundial del presidente norcoreano, dada la naturaleza hermética de su régimen y sus escasísimas apariciones en público, ha propiciado que durante su viaje a Rusia se tomen innumerables fotografías allá por donde pisa.
Durante el pasado sábado estuvo en la ciudad de Vladivostok, al sureste del país, donde el Ministro de Defensa, Shoigu, le mostró los grandes avances en materia aeronáutica y armamentística del Kremlin, ante lo que el líder norcoreano reconoció quedar "sinceramente sorprendido", mostrando admiración y respeto por el "gran trabajo de los ingenieros y funcionarios rusos" en esta labor.
La 'sombra' de Kim Jong Un
Pero de entre todas las instantáneas tomadas al Kim, -junto a Putin, ministros, guardaespaldas, diplomáticos y funcionarios...- han destacado varias en las que aparece un joven con papel y boli en mano, ubicado justo detrás de él.
Esta presencia ha llamado la atención de muchos, que se preguntan quién es y cuál es su función en la comitiva del líder supremo. Según ha conocido el diario neerlandés Telegraaf, el joven, ataviado con uniforme militar y medallas de reconocimiento, tendría el cometido de escribir todo lo que dice Kim Jong Un durante el viaje en sus conversaciones con los altos cargos rusos.
Sería algo parecido a la figura de un apuntador aunque esta labor es 'voluntaria', ya que según indican varios medios, es una práctica muy común en Corea del Norte apuntar todo lo que dice Kim Jong Un, entendido como una muestra de devoción e idolatría hacia su persona.
No son las trascripciones oficiales
Esta información ha sido revelada por Remco Breuker, especializado en Corea de la Universidad de Leiden: "Todo lo que dice el gran líder es tan especial en Corea del Norte que hay que escribirlo", además de insistir en que es una práctica que cualquier ciudadano también realiza en señal de "lealtad".
Pese a todo, Breuker asegura que las trascripciones de esta persona, que no se separa de su lado, no sirven como oficiales, ya que posteriormente "se reescriben y editan, y así es como luego se informa de ellas en los medios de comunicación estatales", concluye el especialista.