China bloquea a los "amigos" de Putin
Pekín no quiere que le salpiquen las sanciones internacionales contra su aliado ruso y da algunos pasos atrás en materia bancaria, cada vez más sensibles.
El Banco de China, el cuarto banco más grande del país, ha comenzado a bloquear cada vez más las transacciones en yuanes de países que Rusia utiliza para adquirir bienes. Una muestra más de que el amigo de Pekín lo sigue siendo para Moscú, pero crece el temor a que le salpiquen las sanciones internacionales por la invasión de Ucrania y, poco a poco, da pequeños pasos atrás. Primos, no hermanos.
Según la información del diario The Moscow Times, recientemente, una empresa de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) no pudo transferir yuanes del banco kazajo CenterCredit al banco chino Zhejiang Chouzhou Commercial Bank. La transacción fue bloqueada por el Banco de China, que actúa como banco corresponsal del banco kazajo, según Vladislav Donchenko, vicepresidente del Comité Jurídico de la Asociación Rusa de Exportadores e Importadores. "Ni el director ni el fundador de la empresa tenían vínculos formales con Rusia", matiza.
Según Donchenko, Chouzhou Commercial ahora sólo acepta pagos de bancos de Kazajstán con los que tiene relaciones de corresponsalía directa. Problemas similares han surgido durante las transferencias a China desde bancos de Georgia y Armenia, afirma Giorgi Okromchedlishvili, analista senior de la consultora ITSWM.
El secretario del Consejo General de la Unión Ruso-Asiática de Industriales y Empresarios, Maxim Spassky, también conoce casos similares y reiteró que el Banco de China tiene el sistema de cumplimiento normativo más estricto y complejo entre los bancos chinos.
"A la mínima sospecha de peligro se niegan inmediatamente a tramitar el pago", afirmó Spassky.
Explicó que, cuando se trata de comprar productos de China, "los pagos de los bienes no esenciales se realizan a través de pequeños bancos regionales". Sin embargo, todo se vuelve más complejo cuando se trata de equipos sofisticados o productos electrónicos y cuando el pagador es una empresa de los Emiratos Árabes Unidos, Kirguistán o Kazajstán.
Mar de fondo
Los bancos chinos están deteniendo masivamente las transacciones con Rusia, y los retrasos en los pagos han aumentado durante agosto, según informó Reuters ya en agosto, citando fuentes informadas sobre la situación. Fue una respuesta al paso de Estados Unidos, que impuso nuevas sanciones a empresas chinas y rusas por su apoyo a la agresión de Moscú. A pesar de los esfuerzos para mitigar el impacto de las restricciones comerciales, las instituciones chinas han comenzado a reducir sus vínculos comerciales con Rusia.
En particular, varios grandes bancos chinos han empezado a bloquear las transacciones de productos electrónicos debido al temor a sanciones secundarias. Actualmente, hay transacciones por decenas de miles de millones de yuanes estancadas, según la agencia.
Este es solo el último ejemplo de las crecientes dificultades en las relaciones económicas entre Rusia y China debido a las presiones de las sanciones estadounidenses por la invasión de Ucrania por parte de Moscú. El comercio entre Rusia y China ha aumentado un 121% desde 2021, destacando el papel de China como un salvavidas económico para Moscú.
Para mediados de 2024, los bancos chinos estaban rechazando y devolviendo alrededor del 80% de los pagos rusos realizados en yuanes chinos, informó el medio ruso estatal Kommersant el 29 de julio, citando fuentes conocedoras del sector.