China no responde al 'pacto del cereal' ruso
Rusia y China firmaron un protocolo sobre los requisitos fitosanitarios que tendrían que cumplir los cereales rusos para su importación en el mercado chino.
Rusia y China firmaron la semana pasada un protocolo sobre los requisitos fitosanitarios que tendrían que cumplir los cereales rusos para su importación en el mercado chino. Para unos esta firma es un paso más para la exportación a corto plazo de grano ruso. Para otros, sin embargo, es un gesto puramente político y, además, un déjà vu.
En febrero de 2022, coincidiendo con la invasión rusa de Ucrania, ambos países ya firmaron un documento que ampliaba las opciones de origen para el trigo y la cebada importados en China. Este permitía que estas materias primas procedieran de toda Rusia, lo que se esperaba, según recoge Agricensus, que permitiera al comercio ruso a utilizar los puertos del Mar Negro para aumentar los envíos.
Sin embargo, más de un año después, y a pesar de que el comercio de trigo y cebada entre ambos países ha aumentado en comparación con el año anterior, está lejos aún de alcanzar niveles significativos, según ha publicado Agrodigital.
Las exportaciones de cereales rusos a China no suelen ser fáciles, ya que las aduanas chinas son reticentes a autorizar el trigo ruso por los problemas fitosanitarios.
Estas son las tres etapas que, por lo general, hay que cumplir para que un nuevo origen pueda ingresar en el mercado chino:
- Establecimiento de estándares fitosanitarios
- Registro de las empresas en la Administración General de Aduanas de China
- La empresa estatal china Cofco tiene que realizar la primera importación para ver cómo funciona el proceso.
China permite en la actualidad exportar trigo de Australia, Francia, Estados Unidos, Sudáfrica, Turquía, Suecia, Rusia, México, Lituania, Kazajistán, Italia, Hungría, Reino Unido, España, Dinamarca y Canadá. Y cebada de Estados Unidos, Ucrania, Rusia, Kazajistán, Japón, Francia, Dinamarca, Canadá, Argentina y Uruguay.