Bachar al Assad y su familia llegan a Rusia bajo condición de asilados por motivos humanitarios
El depuesto presidente sirio había huido del país después de que su régimen fuera derrocado esta madrugada tras 13 años de guerra.
El depuesto presidente sirio Bachar al Assad y su familia se encuentran en Moscú y han recibido asilo en Rusia, según han confirmado fuentes del Kremlin a las agencias rusas Tass e Interfax. Las autoridades rusas han concedido al derrocado mandatario y a su familia el asilo político por motivos humanitarios, añaden estas fuentes.
Al Assad había huido de Siria después de que su régimen fuera derrocado esta madrugada tras 13 años de guerra civil y 11 días desde el inicio de un levantamiento liderado por el grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS u Organismo de Liberación del Levante).
"El presidente de Siria, Assad, llegó junto a su familia a Moscú. Rusia, partiendo de criterios de carácter humanitario, le ofreció asilo", ha señalado la fuente del Kremlin. Y ha añadido que "Rusia siempre abogó por la búsqueda de una solución pacífica a la crisis siria". "Partimos de la necesidad de que se reanuden las conversaciones bajo la tutela de Naciones Unidas", ha afirmado.
Según el representante del Kremlin, "funcionarios rusos están en contacto con representantes de la oposición armada siria, cuyos líderes garantizaron la seguridad de las bases militares rusas y las instituciones diplomáticas en territorio de Siria". Este ha concluido expresando su esperanza de la continuación del diálogo político en interés del pueblo sirio y el desarrollo de las relaciones bilaterales entre Rusia y Siria.
El Ministerio de Exteriores de Rusia aseguró la mañana de este domingo que el presidente sirio había abandonado el país y ordenado una transferencia "pacífica" del poder tras la caída de la capital, Damasco, a manos de las fuerzas rebeldes.
"Como resultado de las negociaciones entre Bachar al Assad y varios participantes en el conflicto armado en el territorio de Siria, ha decidido dejar el cargo presidencial y abandonar el país, dando instrucciones para llevar a cabo la transferencia de poder pacíficamente", señalaba en un comunicado. El Kremlin, no obstante, afirmó que no había participado en estas conversaciones.
Rusia, además, ha solicitado este domingo una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para abordar la situación en Siria. "Rusia solicita urgentes consultas a puerta cerrada del Consejo de Seguridad de la ONU. Esperamos que las consultas tengan lugar en la segunda mitad del lunes, 9 de diciembre, en Nueva York", ha escrito en su canal de Telegram Dmitri Polianski, embajador adjunto de Rusia ante Naciones Unidas.
El gobierno de transición será "civil"
Hadi Al Bahra, presidente del máximo órgano político de la oposición siria en el exilio, la Coalición Nacional Siria (CNFROS), afirmó a EFE este domingo que existe un acuerdo tras la caída del presidente sirio de que el gobierno de transición será "civil". "Hay un acuerdo de que el órgano de gobierno de transición no será de HTS (el islamista Organismo de Liberación del Levante, en español) ni del Gobierno de Salvación. Será civil", afirmó el político sirio en declaraciones en los márgenes del Foro de Doha.
Al Bahra explicó que entre la coalición opositora hay un conjunto de normas "para garantizar que no haya extremismo sobre el terreno, ni mala conducta, ni violación de los derechos humanos", algo que aseguró que "hasta ahora está funcionando muy bien" pese a que todavía no se ha reunido con el líder de HTS, Abu Mohamed al Jolani.
El político, que lidera la oposición en el exilio desde Turquía, recordó los orígenes de Al Jolani, que encabezó el Frente al Nusra, la exfilial de Al Qaeda en Siria, que fue reconvertida posteriormente al HTS tras escindirse de la organización terrorista. "Desde el momento en que HTS cambió su forma de pensar, su forma de actuar, ahora está pensando en resolver HTS. No anunció lo que quiere hacer (...) Solía ser yihadista cuando estaba en Al Qaeda, luego creo que se volvió más islamista durante HTS", opinó.
Asimismo, aseguró que actualmente no hay luchas internas por el poder en el seno de la coalición de fuerzas opositoras, al tiempo que afirmó que el objetivo "es tener una Siria unida, no dividida", por lo que se requiere unir a todas las facciones "bajo un solo gobierno".
En esta línea, dijo que tras la caída de Al Assad no hay intención de desmantelar su partido, el Baaz, y en vez de eso reconvertirlo en una formación "normal" para no repetir los mismos errores en Irak después del derrocamiento del dictador Sadam Husein en 2003. "Si los desmantelamos, los aislamos. Y si los aislamos, se vuelven extremistas", indicó, al tiempo que aseguró que se limitará la "interferencia" de Irán y de Rusia -los principales aliados de Al Assad- de los asuntos de Siria.
El régimen del mandatario sirio, aferrado al poder durante 24 años, colapsó este domingo a manos de los insurgentes liderados por HTS que tomaron Damasco sin apenas resistencia tras 11 días de ofensiva.