Trump se burla de la presunta víctima de abusos sexuales de su candidato al Supremo, Kavanaugh
Los abogados de las acusadoras siembran dudas sobre la investigación del FBI.
El presidente estadounidense, Donald Trump, se ha burlado abiertamente de la mujer que acusa a su candidato a la Corte Suprema, Brett Kavanaugh, de agresión sexual, ironizando sobre el hecho de que no recordara detalles del día en que ocurrió el presunto ataque. "'¿Como llegaste a casa?' No recuerdo. '¿Cómo llegaste allí?' No recuerdo. '¿Dónde estaba el lugar?' No recuerdo. '¿Cuántos años atrás fue?' No sé. No sé. No sé", ha dicho Trump, remedando el testimonio que la profesora Christine Blasey Ford brindó la semana pasada ante un comité del Senado.
"'Pero tomé una cerveza. Eso es lo único que recuerdo'. Y la vida de un hombre está hecha jirones. La vida de un hombre está destrozada", ha agregado el mandatario, durante un mitin de campaña en Mississippi.
Michael Bromwich, abogado de Blasey Ford, ha denunciado en Twitter —poco después de las declaraciones de Trump— el ataque contra su cliente tildando de "vil y desalmado" lo dicho por el mandatario.
Trump ha mantenido un apoyo tenaz a su candidato Brett Kavanaugh, pese a las acusaciones de Ford sobre que la toqueteó e intentó quitarle la ropa durante una fiesta de estudiantes en la década de 1980.
"Son tiempos muy, muy aterradores para los jóvenes en Estados Unidos, donde uno puede ser (considerado) culpable de algo que uno puede no serlo", había dicho Trump más temprano a la prensa en la Casa Blanca.
En tanto, los abogados de dos de las mujeres que acusaron de abusos sexuales a Kavanaugh han asegurado este martes que el FBI no está entrevistando a sus testigos ni siguiendo las guías que podrían respaldar sus testimonios.
Dudas sobre la investigación
Los abogados de Blasey Ford han dicho en una carta dirigida al FBI que los agentes todavía no la han contactado sobre sus acusaciones contra Kavanaugh.
La confirmación de Kavanaugh por el Senado, tras ser nominado por Trump, genera controversia en Estados Unidos y atiza el clima electoral previo a las elecciones legislativas de noviembre.
Su nombramiento a un cargo vitalicio en la Corte Suprema dejaría en minoría durante años a los jueces progresistas o moderados en esta jurisdicción que dirime asuntos como el derecho al aborto, a portar armas de fuego y los derechos de las minorías.
Ahora, los republicanos tienen una mayoría en el Senado de 51 escaños, frente a 49 demócratas, una situación que podría cambiar tras las elecciones, por lo que la fecha de la votación para confirmar a Kavanaugh —que depende de la investigación— es clave.
Bromwich y Debra Katz, ambos abogados de Blasey Ford, también cuestionaron que aparentemente el FBI tomó la decisión de no entrevistar a Kavanaugh, y expresaron una preocupación de que el organismo no esté haciendo un seguimiento a los testigos y la evidencia que se le delegó.
"No hemos recibido ninguna respuesta de nadie involucrado en esta investigación, ni ninguna respuesta a nuestro ofrecimiento de que la doctora Ford sea entrevistada", han dicho en una carta.
En cambio, John Clune, el abogado que representa a Deborah Ramírez, una mujer que acusó a Kavanaugh de abusos mientras estudiaban en la Universidad de Yale, ha afirmado en Twitter que los agentes del FBI han entrevistado a su clienta el domingo.
El letrado también ha indicado que el organismo ha aceptado una lista de 20 testigos que pueden corroborar sus acusaciones.
Sin embargo, ha dicho que no tiene constancia de que se esté haciendo un seguimiento del testimonio de Ramírez, que acusa a Kavanaugh de frotarle los genitales en la cara, de manera forzada, durante una fiesta con mucho alcohol de por medio, también en la década de 1980.
"Aunque no sabemos el estado de la investigación, no estamos al tanto de que el FBI se haya acercado a ninguno de esos testigos", ha tuiteado Clune. "Nos preocupa que el FBI no esté llevando a cabo -o no se le permita conducir- una investigación seria", agregó.
La prestigiosa facultad de Derecho de la Universidad de Harvard ha confirmado este martes que Kavanaugh no impartirá un curso previsto para enero de 2019, titulado "La Corte Suprema desde 2005".
Más de 860 graduados de Harvard habían firmado una carta pidiendo que Kavanaugh, de 53 años, fuese excluido como ponente y como académico de esa prestigiosa facultad.