Rusia sigue tensando la cuerda y envía numerosos aviones sin identificar frente a las fronteras de la OTAN
La OTAN ha tenido que activar varias veces en los últimos cuatro días las misiones de policía aérea.
Rusia sigue tensando la situación internacional a las puertas de la OTAN. Semanas después de bombardear puntos en Ucrania muy cercanos al territorio aliado, en los últimos cuatro días, la propia alianza atlántica ha reconocido haber activado varias veces sus misiones de policía aérea ante el aumento de aviones rusos sin identificar rozando las fronteras aéreas occidentales.
Estas aeronaves, de las que no se han facilitado más datos, han sido rastreadas e interceptadas por los cazas OTAN, incluidos algunos españoles, que vigilan el Báltico y el Mar Negro, confirma una publicación de la entidad supranacional.
Según han explicado, los aviones rusos que se han aproximado a la frontera de la Alianza sin cumplir con las normas internacionales de vuelo se han multiplicado desde el pasado martes, provocando la alerta en los Centros de Operaciones Aéreas Combinadas (CAOC) de la OTAN en Uedem, Alemania y Torrejón de Ardón (Madrid).
Estos, encargados de rastrear el cielo aliado, lanzaron aviones de combate en sus respectivas regiones para interceptar e identificar los aviones que se acercaban a la frontera, que no han llegado a traspasar en ningún momento.
En concreto, esta semana han sido activados cazas de Polonia, Dinamarca, Francia y España sobre el Mar Báltico. En la región del Mar Negro, aviones QRA de Rumania y el Reino Unido han sido los encargados de investigar pistas desconocidas que se acercaban al espacio aéreo aliado.
El antecedente ‘sueco’
No es la primera jugada de desconcierto reciente desarrollada por Rusia en el espacio aéreo. Poco después de que el Kremlin amenazase con “represalias” a Suecia y Finlandia si se acercaban a la OTAN, las autoridades suecas denunciaban que cuatro cazas rusos habían violado su espacio aéreo.
“A la luz de la situación actual, nos tomamos el incidente muy en serio. Es una acción poco profesional e irresponsable por parte de Rusia”, apuntó entonces el jefe de la fuerza aérea del país escandinavo, si bien matizó que las acciones no fueron a más.
La OTAN celebra su “rápida” respuesta al desafío
Tras los últimos sucesos, el general de división Jörg Lebert, jefe de Estado Mayor del Comando Aéreo Aliado, ha celebrado la “rápida” respuesta de los centros de control de la OTAN. Esto, añade, “demuestra la preparación y la capacidad de las fuerzas de la OTAN para proteger los cielos aliados las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 365 días del año”.
Los aviones militares rusos a menudo no transmiten un código de transpondedor que indique su posición y altitud, no presentan un plan de vuelo o no se comunican con los controladores de tráfico aéreo, lo que provoca la reacción de la OTAN por el “riesgo potencial” que representan para los aviones civiles.
En ese macrooperativo participa España con un contingente en Lituania de 130 militares del Ejército del Aire y ocho cazas Eurofighter, tras haber desarrollado otra misión en Bulgaria.