Reunión de altura de Putin y Xi en Uzbekistán, con Ucrania y Taiwán en rojo en la agenda
Los líderes de Rusia y China se vieron en febrero, pero el mundo se ha dado la vuelta desde entonces. El mensaje que salga de su cita se espera con ansia.
Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y China, Xi Jinping, hablarán sobre el conflicto en Ucrania y las tensiones en torno a Taiwán en una reunión que mantendrán este jueves por la tarde en Uzbekistán. Una reunión de enorme trascendencia, con los líderes de los dos países que ahora mismo más incomodan a Occidente, de la que pueden surgir importantes mensajes.
“China aborda la crisis de Ucrania de manera equilibrada al asegurar que entiende los motivos que obligaron a Rusia a iniciar la operación militar especial”, ha adelantado Yuri Ushakov, asesor del Kremlin, a los medios locales.
La marcha de la campaña militar en Ucrania, en la que Rusia retiró recientemente sus tropas de la región de Járkov, limítrofe con el Donbás, será tratada “con profundidad”, explicó sobre la reunión que tendrá lugar en la histórica Samarcanda en el marco de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), un organismo donde se coordinan políticas sobre seguridad regional, terrorismo, separatismo étnico y extremismo religioso entre Rusia, China, Kazajistán, Kirguizistán, Tayikistán y Uzbekistán.
El portavoz recordó que la pasada semana Putin abordó ambos asuntos en Vladivostok con el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Nacional Popular, Li Zhanshu. “Con él se abordaron algunos asuntos como Ucrania, Taiwán y otros. Ese debate, solo que a un más alto nivel y con una agenda más amplia, proseguirá en la reunión entre nuestros líderes”, explicó.
Ushakov resaltó que la reunión, que se producirá durante el primer viaje al exterior de Xi en más de dos años, tiene una “importancia especial” dada la “inquietud” que despierta la actual situación internacional.
En el caso de Xi, además, su salida es la primera de su país desde 2020, a causa de los estrictos controles que él mismo ha impuesto por la pandemia de coronavirus.
Desde febrero
Putin y Xi ya se reunieron en febrero pasado, tres semanas antes del inicio de la “operación militar especial” rusa en Ucrania, con ocasión de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno, pero entonces sus conversaciones se centraron en asuntos comerciales. Ambos líderes proclamaron la “amistad sin límites” entre sus naciones y poco después, el 24 de ese mes, Rusia atacó a Ucrania.
Desde el estallido del conflicto, China ha mantenido una postura ambigua y ha pedido respeto para “la integridad territorial de todos los países”, incluido Ucrania, y atención para las “legítimas preocupaciones de todos los países”, en referencia a Rusia. Pekín ha declarado repetidamente su oposición a las sanciones contra Moscú por “no tener base en el derecho internacional” y “no solucionar los problemas”.
La reunión se produciría cuando las relaciones de China con los países occidentales también se encuentran en un mal momento a raíz de las tensiones en el Estrecho de Taiwán tras la visita a la isla en agosto de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, tras la cual Pekín realizó maniobras militares alrededor de la isla, algo que Taipéi definió como “un bloqueo”.
Los intercambios comerciales Rusia-China ascendieron en los primeros siete meses a 93.000 millones de dólares, un alza del 25 % en comparación con el mismo período de 2021, precisó.
Ushakov también adelantó que Rusia, China y Mongolia abordarán en Samarcanda el tendido de un gasoducto a través de territorio mongol para suministrar al norte de China con gas ruso.
Putin también se reunirá en Samarcanda con el líder turco, Recep Tayyip Erdogan, con el que hablará del acuerdo sobre exportación de cereal ucraniano y ruso, que Moscú considera que no se está cumpliendo debido a las sanciones occidentales. También abordará con el líder iraní, Ebrahim Raisí, el programa nuclear de la república islámica y su deseo de ingresar en la OCS.