Obispos de EEUU piden a los fieles que no acepten la vacuna de Johnson & Johnson
Expresan “preocupaciones morales” por el uso de células cultivadas en laboratorio que provienen de otras extraídas del tejido de fetos abortados en la década de los 80.
La Conferencia de Obispos Católicos estadounidense, junto con otras 6 diócesis de todo el país, ha pedido a los fieles que eviten ponerse la vacuna recientemente aprobada de solo una dosis de Johnson & Johnson si tienen la posibilidad de inyectarse otra.
Mientras la ciencia se vuelca en la carrera de la vacunación, la Iglesia ha intervenido para disuadir a los creyentes con declaraciones en las que expresan “preocupaciones morales” por el uso de células cultivadas en laboratorio que provienen de células extraídas del tejido de fetos abortados en la década de los 80.
La vacuna Johnson & Johnson ha sido autorizada recientemente en EEUU y a diferencia de Moderna y Pfizer, requiere una sola dosis y puede mantenerse a temperatura normal en el frigorífico, lo que facilita su transporte.
Los expertos en salud han advertido que los estadounidenses deben recibir la vacuna que se les ofrezca.“No estamos en un escenario en el que podamos elegir vacunas”, reconoce el Dr. Paul Goepfert, director de la Clínica de Investigación de Vacunas de Alabama.
Las declaraciones de los obispos contradicen lo expuesto por el papa Francisco previamente, quien recibió una vacuna en enero. La nota de diciembre decía que “el uso de tales vacunas no constituía una cooperación formal con el aborto del que derivan las células utilizadas en la producción de las vacunas”.