Muere a los 91 años el dictador guatemalteco José Efraín Ríos Montt
"Murió en paz, tranquilo, y todos con la convicción de que en este país nunca hubo genocidio y fue inocente de lo que se le acusa", ha dicho su abogado.
El dictador guatemalteco Efraín Ríos Montt ha fallecido este domingo a los 91 años en su vivienda de Ciudad de Guatemala, la capital del país, según ha informado el abogado de la familia Luis Rosales.
"Falleció en su hogar, con el amor de su familia, con su conciencia sana, limpia, rodeado de mucho amor, aquejado por las dolencias que sabemos y de las cuales se ha informado a los órganos judiciales", ha explicado Rosales.
"Con la convicción de que nunca hubo genocidio"
"Murió en paz, tranquilo, y todos con la convicción de que en este país nunca hubo genocidio y fue inocente de lo que se le acusa", ha aseverado el letrado, que también fue diputado del Partido Republicano Institucional (FRG), formación fundada como Frente Republicano Guatemalteco por el general retirado y que llevó a la presidencia a Alfonso Portillo.
No han trascendido detalles sobre la causa de la muerte de Ríos Montt, que estuvo al frente del país centroamericano entre 1982 y 1983 tras un golpe de Estado, pero en los últimos meses se había informado de que padecía una demencia que le afectaba a la memoria, el cálculo, la capacidad de abstracción.
Complicaciones cardiacas
La exdiputada del FRG Lucrecia Marroquín de Palomo, cercana a la familia, ha aseverado que Ríos Montt murió debido a complicaciones cardíacas, según ha recogido el diario local Prensa Libre.
El velatorio se ha desarrollado de forma privada en su vivienda. Sobre las 15.00 de la tarde (hora local) ha sido trasladado al cementerio de La Villa, en la zona 14 de la capital guatemalteca, donde ha sido enterrado.
Ríos Montt fue condenado a 80 años en mayo de 2013 por la sangrienta ofensiva en la que sus militares torturaron, violaron y masacraron a miles de indígenas en uno de los episodios más terribles de la cruenta guerra civil que asoló al país centroamericano durante 36 años y dejó más de 250.000 muertos. La sentencia fue anulada por la Corte de Constitucionalidad por un error de procedimiento en el juicio.
El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) certificó recientemente que Ríos Montt sufría un deterioro cognitivo que le habría impedido supuestamente defenderse adecuadamente en caso de que se hubiera abierto un nuevo proceso en su contra por la masacre de 1.770 indígenas ixil maya durante su mandato entre 1982 y 1983.