Marlaska alega que fue su número 2 quien cesa a De los Cobos y que trató de "respetar su carrera" al no hablar del 8-M
Defiende que el cese fue redactado pensando en un posible recurso del coronel y se ve víctima del "desmantelamiento del Ministerio del PP".
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado este miércoles en el Congreso de los Diputados que no relacionó en sus primeras comparecencias el cese del coronel Diego Pérez de los Cobos con el informe del 8-M enviado a la juez que investiga la primera respuesta al coronavirus por “respeto a la carrera profesional” de este alto mando de la Guardia Civil.
“No voy a dimitir, no he cometido ninguna ilegalidad, ni yo ni me equipo. Yo no he cesado al señor Pérez de los Cobos, sino que ha sido el secretario de Estado a propuesta de la Guardia Civil”, ha dicho en la sesión de control al Gobierno en el Congreso, donde se ha enfrentado a tres preguntas y también a una interpelación de Ciudadanos.
Ante las reiteradas peticiones de dimisión realizadas por parte de PP, Ciudadanos y Vox, Grande-Marlaska ha repetido ―como este martes en el Senado― que el cese estuvo relacionado con una filtración del informe del 8-M remitido a la juez Carmen Rodríguez-Medel, aunque añadiendo ahora que quiso respetar la carrera profesional de Pérez de los Cobos al no mencionarlo en un primer momento.
“No quise decir nada porque tengo respeto a la carrera profesional del señor Pérez de los Cobos, ustedes están tratando de indagar en más razones y perturbar esa carrera profesional”, ha respondido ante las críticas de la oposición por el relevo del coronel jefe de la Comandancia de Madrid y, antes de esto, alto cargo de la Secretaría de Estado de Seguridad y también coordinador del dispositivo policial para impedir el referéndum del 1-O.
Al igual que hizo por la mañana el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el ministro del Interior se ha presentado como víctima de su decisión de “desmantelar el Ministerio del PP”, en alusión a la llamada ‘policía política’.
En el debate se le ha recordado las últimas polémicas, como que anunciara la equiparación salarial el día del relevo en la Guardia Civil o el rastreo de bulos durante la pandemia de coronavirus. “No hay persecución política, no hay actuaciones arbitrarias o contrarias al derecho, no hay sectarismo”, ha comentado Grande-Marlaska antes de sostener que PP, Vox y Cs “añoran” el Ministerio del Interior que “intentaba influir en investigaciones judiciales o incluso filtraban informes a medidas”.
“No es de recibo filtrar informes”
Según Grande-Marlaska, no hay contradicción en las versiones que ha dado sobre Pérez de los Cobos, cuya carta de cese ―según él, siguiendo la jurisprudencia del Tribunal Supremo― contiene una motivación con una “redacción en la que cabe una mala interpretación”, algo que, en cualquier caso, ha achacado a una “mala intención” por parte de quien lee dicho documento reservado publicado este martes por El Confidencial.
Además, ha defendido que tiene derecho a formar equipos con cargos de confianza “neutrales” y ha calificado como “lógico” que el ministro del Interior entienda de las investigaciones en marcha, no así del contenido concreto de los informes o de las diligencias, poniendo para ello de ejemplo lo que ocurre en actuaciones como la desarticulación de una célula terrorista bajo la dirección de un juez.
En este sentido, ha negado que se incurriera en una injerencia hacia el Poder Judicial o que quisiera directamente liderar la investigación por la filtración del informe del 8-M enviado a la juez Carmen Rodríguez-Medel, algo que, ha dicho, corresponde en todo caso a la Policía Judicial.
“No es de recibo que se filtren informaciones judicializadas cuando rige el secreto y no han tenido acceso las partes”, ha señalado, remitiéndose a su etapa como juez y a la preocupación por el “juicio social paralelo” que se realiza con este tipo de actuaciones. “Todas las filtraciones tienen un interés de dirigir la opinión, como el que ustedes alientan contra mí”, ha enfatizado.
Alusión a Margarita Robles
“Parece que usted quería defender al Gobierno en una investigación judicial”, le ha reprochado el diputado de Ciudadanos Edmundo Bal durante la defensa de la interpelación, acusando al ministro del Interior de “mentir” porque en el caso de preocuparle la filtración del informe del 8-M debería esperar a que esto lo investigara un juez.
Tanto Bal como la diputada del PP Ana Vázquez han citado a la ministra de Defensa, Margarita Robles, cuestionando que la nueva cúpula de mando de la Guardia Civil que encabeza el general Pablo Salas haya sido consensuada previamente entre ambos ministerios. El diputado de Ciudadanos ha recordado su pasado como abogado del Estado para lamentar que Grande-Marlaska “ha dilapidado” su prestigio.
El ministro ha pedido respeto para el general Salas y la nueva cúpula de la Guardia Civil, recordando los ceses durante los gobiernos del PP o la salida de Pablo Martín Alonso de la Dirección Adjunta Operativa (DAO) en la etapa de antecesor, Juan Ignacio Zoido.
También le ha preguntado a Edmundo Bal por qué cuestiona su pérdida de confianza en mandos policiales cuando gobiernos autonómicos y locales de Ciudadanos han llevado a cabo remodelaciones, citando el cese del 82% de los cargos del Ayuntamiento de Madrid, “entre ellos el director general de la Policía Municipal”. Esto último ha llevado al ministro a defender que el Gobierno y su equipo “corren el riesgo de ser honrados y de parecerlo”, mientras que la oposición “solo quiere parecerlo”.