Biden culpa a Trump "y su ego herido" de incitar el asalto al Capitolio con una "red de mentiras"
Un año después del ataque violento, el actual presidente de EEUU ha dejado claro que los radicales "fallaron".
EEUU aún se recupera del shock por el asalto al Capitolio. Un año después, Donald Trump “no puede aceptar que perdió·, en palabras de Joe Biden. El actual presidente estadounidense se ha dirigido a la nación en el primer aniversario de la irrupción de radicales trumpistas en la sede de la democracia.
Para Biden “el ego herido” de Trump “le importa más que nuestra democracia y nuestra constitución”. Por ello vuelve a culpar al exlíder republicano de crear “una red de mentiras” con la que incitó a sus seguidores.
Desde el mismo Capitolio de Washington, Biden ha recordado a los cinco muertos y 140 agentes heridos en un ataque que “debemos asegurarnos que nunca vuelva a suceder”.
“Aquí está la verdad: el ex presidente de los Estados Unidos creó y difundió una red de mentiras sobre las elecciones de 2020. Lo hizo porque valora el poder sobre los principios. Porque su ego herido le importa más que nuestra democracia o nuestra Constitución. Por primera vez en nuestra historia, un presidente que acababa de perder una elección trató de evitar la transferencia pacífica del poder cuando una turba violenta violaba el Capitolio. Pero fallaron”, ha añadido el líder demócrata.
Visiblemente irritado, Biden insistió en que hay “cero pruebas” de las denuncias de fraude electoral que Trump difundió y que aún causan efecto en una importante proporción de los votantes republicanos.
“No puedes amar nuestro país solo cuando ganas. No puedes obedecer la ley solo cuando te conviene. No puedes ser patriótico cuando abrazas las mentiras y las permites”, ha continuado el líder norteamericano, para quien Trump “no solo es un expresidente”. “Es un expresidente derrotado, por un margen de más de 7 millones de sus votos, en unas elecciones completas, libres y justas”.
Ante el ruido de una nueva ofensiva republicana, Biden prometió mantenerse alerta: “Defenderé esta nación. No dejaré que nadie ponga una daga en la garganta de la democracia”.
Trump sigue a lo suyo, alentado por los suyos
Nada ha cambiado por parte de Trump. Vetado de las principales redes sociales y en un intento de reconstrucción personal y política, el que fuera presidente entre 2017 y 2021 no da atisbo de arrepentimiento. Sigue acusando sin pruebas, como hizo entonces, a Biden de imponerse en unas elecciones fraudulentas, ante el apoyo de los suyos. En las filas republicanas quienes han querido desmarcarse de la línea marcada por Trump han caído a la segunda fila.
En una campaña sin precedentes, el magnate avivó la llama del odio entre sus radicales, que se concentraron frente a la sede del Capitolio el pasado Día de Reyes. Mediada la tarde local, la tensión se descontroló, provocándose una entrada violenta de fanáticos.
La cita no era casual, ese mismo día, los representes republicanos y demócratas debían validar los votos electorales que concediesen la victoria oficial a Joe Biden, tras casi dos meses de recuentos, polémicas y rabietas judiciales de Trump y su equipo. Incluso se conocieron audios en los que el propio derrotado llamaba a “luchar hasta el final” para que no se “llevasen” la Casa Blanca.
La acción violenta que Donald Trump alentó y no condenó (solo al final llamó a la calma y a volver a casa a sus seguidores) dio lugar a un segundo impeachment contra el presidente saliente. Este tampoco salió adelante por el bloqueo de la mayoría republicana por entonces en el Senado.