Investigadores de Estados Unidos desarrollan unas joyas con hormonas anticonceptivas para no quedarse embarazada
Al modo de los parches para dejar de fumar o contra los mareos.
Investigadores de la Escuela de Ingeniería Química y Biomolecular del Instituto de Tecnología de Georgia (Estados Unidos) han desarrollado unas joyas anticonceptivas que funcionan mediante la aplicación de una dosis de hormonas en parches en contacto con la piel.
El estudio incluye joyas de diverso tipo en las cuales alojar ese parche: pendientes, relojes o collares. De este modo, el organismo absorbería el compuesto como ocurre con los tratamientos transdérmicos que se utilizan en casos más habituales, como para dejar de fumar o para evitar mareos.
“Ya que ponerse joyas o complementos puede que sea parte de la rutina diaria de una mujer, esta técnica puede facilitar el cumplimiento del régimen de medicamentos, por lo que podría ayudar a algunas mujeres a prevenir embarazos no deseados”, afirman investigadores de un trabajo que ha sido publicado en el Journal of Controlled Release, un diario médico de referencia.
El parche se compone de tres capas: una impermeable que incluye un adhesivo para sujetarlo en un pendiente, en la parte inferior de un reloj de pulsera o en la superficie interior de un collar o anillo; una capa intermedia con el medicamento anticonceptivo en forma sólida; y una externa con un adhesivo para adherirse a la piel con el fin de que la hormona se transfiera.
El experimento ya se ha probado en animales, a los que se les ha aplicado en periodos de 16 horas, con un plazo de ocho horas de descanso a modo de las horas de sueño.
Las pruebas recogidas en el estudio sugirieron que aunque los niveles bajaron al ser retirados, el parche podría producir las cantidades necesarias de la hormona en el torrente sanguíneo. En el caso de llegar a aplicarse a humanos, la parte posterior debería cambiarse de forma periódica.
La técnica podría potencialmente usarse para administrar otros productos farmacéuticos, aunque solo sería adecuada para medicamentos permeables a la piel que requieren la administración de cantidades lo suficientemente pequeñas como para caber en los parches.