Ucrania y Rusia siguen con la puerta entreabierta al acuerdo y Zelenski cierra definitivamente la de la OTAN
El presidente ucraniano asume que su país no entrará en la alianza en una jornada que deja nuevos ataques en Kiev, Járkov y al sur y una intensa agenda de reuniones.
Diario de guerra, día 20. El mundo se mueve hacia (y por) Europa. Es el centro de todas las miradas y todas las agendas, con el refuerzo de la vía negociadora en múltiples puntos. Al filo de entrar en la tercera semana de guerra, la ofensiva rusa se mantiene cruenta contra Kiev y otras ciudades ucranianas. Las bombas no cesan ni se toman pausas.
Sí lo hace la diplomacia. Ucrania y Rusia han vuelto a darse un tiempo para seguir, mañana miércoles, la interminable cuarta ronda de negociaciones. Ambas partes ven “espacio para el compromiso” (así lo define Kiev), pero también muchos puntos de desencuentro. Pequeños progresos que, al menos, mantienen abierta la vía de la negociación.
Zelenski ha confesado a los mandos militares de la OTAN su pesar por la asunción de una realidad: Ucrania no será parte de la Alianza Atlántica... eso mismo que no quería la organización. El desencuentro (y el desencanto) es evidente.
¿Qué nuevos ataques deja el martes?
Después de que Putin abriera su ofensiva, calculando para atacar puntos rozando (pero sin tocar) territorio OTAN, ahora los frentes activos son los mismos que han venido sufriendo las bombas y el asedio de las últimas fechas. En Kiev se intensifican las bombas, antesala de lo que todos dan por seguro ataque masivo ruso. La capital vuelve a regirse por un toque de queda nocturno.
Las agresiones contra instalaciones civiles se han vuelto a sentir en Járkov y las dos grandes objetivos del sur, la asediada Mariúpol, y la deseada por Putin Odesa.
¿Qué nuevas sanciones han caído hoy?
Por partida doble. Bruselas y Moscú... con la Casa Blanca de por medio. La UE ha oficializado su cuarto paquete, que incluye medidas directas contra Roman Abramovich y otros 14 oligarcas (alguno ligado a los medios de propaganda rusa) y varias empresas de sectores clave como el hierro y el acero.
Rusia, por su parte, ha tomado la decisión de prohibir la entrada en su territorio a Joe Biden, su secretario de Estado, Antony Blinken, su portavoz y otros altos cargos, además de su hijo. Una restricción que no cambia nada, en palabras de la Casa Blanca, que hasta se ha permitido el lujo de vacilar al Kremlin por haber castigado “al Biden padre (ya fallecido) y no al hijo”.
¿Las negociaciones avanzan?
Sí pero no. Ucrania ha confirmado, ya de noche, que las conversaciones se retomarán el miércoles, después de haberlas “pausado” el lunes. La versión de Kiev, expresada por su delegado Majail Podolyak, habla de una negociación “viscosa”, muy difícil en la que hay “contradicciones fundamentales”, pero también “espacio para el compromiso”.
El miércoles se avecina fundamental, tras dos jornadas de diplomacia sin resultados pero con la esperanza de que la línea de negociación sigue abierta.
¿Y qué ha pasado en la reunión de Zelenski con la OTAN?
El presidente ucraniano se ha visto, por videoconferencia, con altos mandos militares de la Alianza Atlántica. Entre resignado y contrariado, ha asumido lo que desde la organización ya habían dejado claro: Ucrania no va a entrar en la OTAN.
No han faltado reproches de Zelenski al bloque occidental, del que ha dicho que escuchó “durante años que sus puertas estaban “supuestamente abiertas”
N, pese a haber escuchado “durante años” que “las puertas” de la Alianza Atlántica estaban “supuestamente abiertas” en realidad. “Ha quedado claro que Ucrania no es miembro de la OTAN. Lo entendemos. Ya hemos visto que no podemos entrar”.
El líder europeo ha vuelto a insistir en la necesidad de cerrar el espacio aéreo, extremo que la OTAN se niega porque podría suponer “la Tercera Guerra Mundial”. Ante la sucesión de negativas, Zelenski se ha agarrado a la fuerza de su propio pueblo: “Me alegra que nuestra gente esté comenzando a entender esto y confíen en ellos mismos y en los socios que nos ayudan”, un remate con recado incluido a los altos mandos OTAN.
Una de viajes por Europa: ¿dónde van Sánchez, Biden y varios líderes del este?
Se mueve el mundo por toda Europa. Hace unos días, Pedro Sánchez anunció una gira europea para tratar de unificar una postura antes del Consejo Europeo de la próxima semana en materia energética. Hoy se ha sabido su ruta: desde el miércoles se verá con los líderes de Croacia, primero de su agenda. A partir de ahí hay encuentros programados con sus homólogos de Eslovaquia, Rumanía, Grecia, Portugal e Irlanda, además de los mandatarios de Italia y Alemania.
También planea viaje Joe Biden, que vendrá a Bruselas el 24 de marzo para asistir a la reunión de la OTAN
Y, en un rango menor de kilómetros, pero más resonante por el destino elegido, los primeros ministros polaco, checo y esloveno viajan a Kiev para mostrar su apoyo a Zelenski.
A punto de cumplirse tres semanas, ACNUR ha confirmado este martes la salida de tres millones de personas de Ucrania. El ritmo, que se vio ralentizado días atrás, ha vuelto a acelerarse ante los nuevos ataques contra ciudades y la apertura de algunos corredores humanitarios.
De esa cifra, alrededor de un 50% son niños, lo que eleva la cuenta de menores desplazados a un millón y medio, según datos de UNICEF.
¿Qué ha pasado con la periodista rusa que denunció la guerra en pleno informativo?
El nombre de Marina Ovsiannikova ya es parte de la historia de esta guerra. La periodista rusa se atrevió a sacar una pancarta diciendo “No a la guerra” y acusando a su Gobierno de mentir a los ciudadanos en mitad de un directo del principal canal de televisión.
De inmediato fue detenida por las autoridades, en el marco de la represión que están llevando a cabo contra cualquier atisbo de crítica a la guerra. Tras varias horas sin noticias suyas, Ovsiannikova reapareció en un tribunal, que le ha condenado a una multa de 30.000 rublos (255 euros al cambio actual) por su simbólica acción.