Campo, sobre los roces PSOE-UP: "Hay tensiones, pero tengo claro que hay un sólo Gobierno"
El ministro de Justicia habla de "anormalidad" pero no de "deslealtad" de dos formaciones diferentes que tienen, no obstante, el mismo objetivo.
El ministro de Justicia, el socialista Juan Carlos Campo, ha reconocido este miércoles que hay “tensiones” entre los socios de Gobierno, PSOE y Unidas Podemos, aunque sostiene que se tratan de forma “civilizada” y que, pese a las críticas cruzadas, no hay “deslealtad”, sino metas comunes de gestión.
En una entrevista concedida al programa Hoy por hoy de la Cadena SER, Campo se ha referido al plan del Gobierno para el reparto de fondos de la Unión Europea, de cuyo equipo gestor se había dejado fuera inicialmente al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, lo que ayer generó un choque en la reunión del Consejo de Ministros.
Confirma el titular de Justicia que él no tenía conocimiento de ese plan y reconoce que hay tensiones en el seno de la coalición, pero les quita hierro. “Somos dos partidos con orientaciones comunes, pero con muchos matices diferenciales. Yo no percibo esa tensión que algunas veces leo en los medios. Hay tensiones, pero de una manera muy civilizada”, sostiene. “Tengo claro que hay solo una acción, un solo Gobierno”, abunda.
“El ambiente -en el Consejo de Ministros- fue esperanzador. Había grandes noticias en el orden del día. Estamos viendo la luz al final del túnel. Hay una programación de vacunas que nos permite estar esperanzado. Hay que seguir”, ha dicho, poniendo el foco en la tarea de gobernar y no en las desavenencias puntuales. “Somos dos partidos con orientaciones comunes, pero con muchos matices diferenciales”, insiste.
Sobre la enmienda que Unidad Podemos ha presentado a las propias cuentas del Ejecutivo, de la mano de ERC y Bildu, Campo ha asumido que ese fue un gesto “raro, anormal”, pero que corren nuevos tiempos y los partidos, forzados a sumar, tienen que “acostumbrarse” a convivir por una meta común. Los dos aliados tienen “formas diferentes de hacer política” pero, remarca, hay que ser “flexibles” para no perder de vista el objetivo común de mejorar España.
Ante la pregunta de si esas enmiendas y críticas son un ejemplo de deslealtad por parte de los de Pablo Iglesias, el ministro lo niega, prefiere insistir en el término “anormal” porque “no es corriente”, pero afianza su confianza en “todo” el Consejo de Ministros, sea del color que sea cada ministro.
Al hilo de las cuentas de 2021, Campo ha afirmado: “Ojalá estos Presupuestos fueran avaladas por todos los partidos del arco parlamentario”. ¿Incluido Bildu? “Por todos”, ha insistido. “Son unos Presupuestos transformadores, con sumas millonarias y necesitamos contar con un instrumento para articular las reclamaciones de la sociedad”, defiende.
A propósito de la reforma del Consejo General del Poder Judicial y las negociaciones iniciadas para ello con el PP, el sevillano ha dicho que tiene “esperanza” de que “en un período corto o mediano” haya un acuerdo.“El mandato constitucional es renovar los órganos. No hay alternativa”, insiste.
Una nueva ley que “armoniza” con Europa
Campo acaba de poner sobre la mesa la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal, que defiende porque “nos armoniza con Europa”.“Cumplimos el reglamento obligado y esto es lo que hace toda Europa, que el rol lo tiene el ministerio fiscal”, indica.
“Del PP espero una respuesta de acuerdo. Desde 2001, el pacto de estado entre PP y PSOE se aprobó este cambio en esta línea. Estoy convencido en que no va a haber problemas en los puntos fundamentales”, abunda. “Uno de los objetivos es la imposibilidad de que partidos políticos y sindicatos puedan ejecer la acción penal. Esa es la opción que se pone sobre la mesa”.
“Se limita la forma de dar información a través del ministerio fiscal (...). No se introduce nada que no estuviera ya. Si el foco de la instrucción va a estar en el fiscal es el ministerio fiscal el que lo tendrá que centrar. No podemos que normalizar la filtraciones a la presa. En la fase de instrucción la presunción de inocencia hay que protegerla. Hay que suprimir la pena de banquillo. Es un ejercicio de responsabilidad de todos. No están cegados los canales de información”, concluye, ante las críticas.