Aplauso unánime a la Guardia Civil por su precioso tuit sobre las lágrimas de este comandante al hablar de Gabriel
"Y sí... se emocionan y lloran porque hay sangre y piel bajo el uniforme".
La Guardia Civil ha publicado un tuit, que en pocas horas tiene más de 5.600 'me gusta' y 1.800 retuits, comentando el emotivo momento que protagonizó este jueves el comandante de la Unidad Central Operativa (UCO) Jesús Reina, quien se emocionó recordando el momento en el que encontraron el cadáver del pequeño Gabriel, durante la rueda de prensa ofrecida el jueves para explicar los detalles de la operación Nemo.
Puedes verlo en este vídeo a partir del minuto 58:30:
"Claro que lloramos. Quien no lo hizo en el momento del hallazgo lo hizo después. Somos humanos", explicaba visiblemente afectado Reina, uno de los mandos que ha tenido una participación más activa en la búsqueda del pequeño Gabriel.
"Cuando llegamos... lo podemos definir como el momento más duro de la carrera profesional de todos", reconoció.
La Benemérita, en su cuenta oficial de Twitter, valora el momento con estas palabras:
Las palabras de la Guardia Civil han provocado la ovación casi unánime de Twitter, que ha querido mostrar su apoyo y respeto al Cuerpo en centenares de comentarios:
Así mismo, la Guardia Civil ha querido poner su grano de arena este jueves con una corona de flores en el homenaje improvisado al pequeño Gabriel en la escultura de La Ballena, en el muelle del Paseo Marítimo. Pincha aquí para ver la imagen en la web de Antena 3.
Mientras tanto, el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Almería, Rafael Soriano, ha decretado este jueves prisión incondicional comunicada y sin fianza para Ana Julia Quezada, la mujer de origen dominicano y de 43 años presunta autora de la muerte de Gabriel.
Los investigadores pensaron y barajaron como hipótesis hasta el último momento que el niño Gabriel Cruz estaba vivo, incluso hasta los instantes previos a la detención de Ana Julia Quezada, que transportaba el cuerpo del niño de la finca en la que lo había enterrado y lo trasladaba en su vehículo hasta Vícar (Almería).
